Por décadas, la tradición fue preparar los Gin&Tonic en vaso de trago largo, de bordes rectos y altos.
Pero desde hace 20 años llegó la copa balón, de forma casi esférica y de gran tamaño.
Las copas de vino están diseñadas para ser sostenidas desde el tallo, al tener más capacidad, permiten poner gran cantidad de hielo sin perder la proporción de gin versus tónica.
2. El gin
A la hora de hablar de un clásico, la primera elección podría ser el tradicional London Dry Gin.
En Argentina hoy están presentes las marcas británicas más reconocidas, que son siempre una gran opción, pero también hay infinidad de otras etiquetas que apuestan al mismo perfil donde el enebro es protagonista.
Se pueden usar marcas de gin nacionales que, sin ser británicos, logran el mismo espíritu.
3. La tónica
A la revolución del gin, con más de 100 marcas distintas solo elaboradas en Argentina, le siguió una revolución de la tónica, aunque de menor envergadura.
“Están las grandes marcas de góndola y varias artesanales”, cuenta Gonzalo Duarte, Head Bartender en Frank’s.
“Para mí, lo mejor es elegir tónicas que no sean muy dulces, para no eclipsar al gin; me gustan las de perfil cítrico, con un amargor presente”, continúa.
4. El garnish
En los últimos tiempos, muchos bartenders y marcas comenzaron a modificar el garnish tradicional del Gin&Tonic, saliendo de la típica piel de limón para agregar especias, frutas, hierbas, incluso verduras, raíces o bitters.
Pero un Gin&Tonic no debería perder su esencia elegante y simple, donde el garnish suma a la mezcla, sin confundirla.
Si vas por lo clásico, iría por una rodaja de pomelo, como mucho sumar una hierba, como un romero.
5. El hielo
Ingrediente muchas veces menospreciado, es clave.
Según Juan Cruz Oviedo, es un tema de cantidad y de calidad: “Me gusta entero, no partido, pero también están perfectos los cubos hogareños".
"Está bueno hacerlos con agua filtrada, para evitar sabores raros, y que en el freezer no haya nada muy aromático, como pescado”.
Si llenás el copón de hielo, se enfría de inmediato y casi no se derrite, tenés que poner hielo hasta que sobresalga por encima de la copa.