Salsas aromáticas para deleitarse con un sabor distinto.

Cuatro opciones de salsas frías para acompañar bastones de verduras y frutas

Papines, bolitas de remolachas, cabecitas de brócoli; corazones de alcauciles, cubos de tofu y hasta centros de lechugas
Hojas de hinojo, coliflor, champiñones.
Bastones de zanahorias, zucchini, pepinos, apio.
recomendaciones vegetales crudos
recomendaciones
de frutas
Cubos de ananá, melón y papaya
Gajos de paltas, damascos, manzanas, duraznos, peras, ananá, frutillas, cerezas, mandarinas y naranjas
Uvas blancas y negras
Es una preparación que se cocina para luego dejar enfriar. Además, resulta apropiada para los veganos ya que se puede hacer con crema de coco que es de origen vegetal.
Salsa con semillas de mostaza y crema de coco
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Esta salsa clásica de la cocina latinoamericana utiliza mucho las semillas, la menta, el ajo y la guindilla. También llamada ají, chile, morrón o pimiento es un fruto que puede ser picante o no.
Salsa de guindillas
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El queso crema es una base delicada para sostener y suavizar otros sabores en salsas frías o calientes. En esta receta de salsa se suma el queso azul, las castañas de cajú saladas y los tomates secos. El toque final del jugo de arándanos es una agradable sorpresa.
Salsa de queso, tomates secos y jugo de arándanos
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Para realzar el sabor de verduras crudas, pastas o buñuelos, esta salsa es un dip suave pero intenso. Intensamente verde, reúne perejil, albahaca, cilantro, espinacas tiernas y hojas de apio que aportan presencia, sin anular al resto. No se cocina, todos los ingredientes van crudos y procesados.
Salsa verde con anchoas y alcaparras
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Miriam Becker, LA NACION

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María borri

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