Con Winamp AOL cambia de piel

Cuando el 2 de junio America Online (AOL) puso 80 millones de dólares para quedarse con Nullsoft, el Winamp dejó de ser sólo una bella pieza de software para convertirse además en algo serio. ¿O era algo serio desde antes y por eso AOL desembolsó tanto dinero?

Creo que la segunda versión es la más correcta, aunque muchas veces tendemos a percibir precisamente al revés los negocios tecnológicos.

El Winamp, como el ICQ hace un año, llegó a un punto en el que había coleccionado tanta atención y tantos usuarios (cinco millones, para ser precisos) que una corporación decidió que valía la pena semejante inversión. Ni AOL ni ninguna otra sociedad anónima pagan 80 millones de dólares (en el caso de Nullsoft) o 287 millones (en el caso de Mirabilis, la empresa creadora del ICQ) porque sí.

Usted puede no haber oído hablar del Winamp y estará preguntándose qué clase de maravilla mueve al principal proveedor de acceso a Internet a deshacerse de 80 millones.

El Winamp es un reproductor de discos compactos musicales, MP3, WAV, MOD, VOC, MIDI y música en línea. Es, en suma, otro software de audio para la PC. Al parecer, no podemos deducir de esto el altísimo valor de mercado que alcanzó Nullsoft.

Tiempo, divino tesoro

Sin embargo, las claves están escondidas en dos partes del párrafo anterior. Por un lado, el Winamp es un muy popular reproductor de audio digital y, segundo, AOL estaba rezagado respecto de su participación en el negocio de la música en línea.

Con esos 80 millones de dólares AOL ha pagado, básicamente, el más precioso material que conoce el hombre: tiempo.

En sólo un año (compró Mirabilis en junio de 1998), AOL consiguió llevar a su corral a dos comunidades muy fuertes dentro de la Internet: los usuarios de ICQ y los de Winamp. En el caso de ICQ, todavía sigue siendo gratuito y continúa sumando adeptos.Esto no hace sino demostrar que lo que AOL necesita no es vender el producto, sino ubicarse estratégicamente.

La intención detrás de la compra de Nullsoft es la misma, pero relacionada con el emergente y muy promisorio mercado de la música y las radios on line.

Aparte las cuestiones estratégicas que a todas luces nos dejan afuera (a menos que usted sea accionista de Nullsoft o de AOL), el Winamp es una de esas maravillas que hay que tener en la PC (a menos que no le guste escuchar música). Al revés que el ICQ, no es gratuito: es shareware y su registro cuesta 10 dólares.

Como otros programas de su clase, ha conseguido una enorme popularidad abriendo un espacio de creatividad para los usuarios.

Por ejemplo, tal como sale de fábrica (en un archivo de instalación de 648 KB) el aspecto del reproductor es poco atractivo. Pero el Winamp cambia con la facilidad de un camaleón por medio de un conjunto de archivos gráficos ( bitmaps de Windows, específicamente) que constituyen lo que en la jerga se denomina skin (piel). Para las especificaciones no oficiales de este sistema puede visitar www.algonet.se/~daniel7/winamp/skinspecs.html .

Adivine quiénes fueron los principales autores de las miles de pieles que existen hoy para el programa. Los usuarios, claro.

Lo que hizo grande a la Internet sigue siendo su principal fortaleza: el deseo y la necesidad que todos tenemos de compartir nuestras creaciones, opiniones e ideas. Queda claro que las pieles para el Winamp son gratuitas y, aunque hay de todo, existen algunas muy profesionales y logradas.

Esta vasta biblioteca donde se incluyen desde las que imitan a los equipos NAD (una de mis preferidas), Sony, Pioneer y Kenwood hasta los temáticos (el de las vacas, llamado Moo , es absolutamente genial), le ha dado un enorme impulso al software, trasladándolo a la muy ambicionada categoría de comunidad , un paso más que el ansiado estándar.

El sitio del Winamp sigue en pie en http://www.winamp.com . Un excelente lugar donde encontrar pieles está en http://1001winampskins.com