El que a hierro mata, a hierro muere
Parece que la guerra de robots se ha puesto de moda. Ya tuvimos que construir y comandar bichos metálicos en juegos como Metal Fatigue , Machines o el primer Dark Reign ; pero para los que nunca se conforman, hay más.
El exitoso juego de estrategia de Activision saca su segunda versión con un motor gráfico por estrenar y muchos modelos de máquinas de guerra, construcción, recolección de recursos y desarrollos tecnológicos. Los combates, así como todo en el juego, están confeccionados en 3D con gráficos renderizados y aceleración por hardware. Con unidades muy bien diseñadas y animadas, todo tipo de armas futuristas y efectos de luces, Dark Reign 2 ofrece mucha más acción que su predecesor e incluso que otros juegos del mismo género.
Desde el primer momento ya estamos en la batalla, con uno de los dos ejércitos a elección bajo nuestras órdenes. Como en la mayoría de las guerras de videojuegos hay dos bandos: el bueno y el malo. A diferencia de la mayoría de los otros títulos de su género, sin embargo, nosotros podemos elegir cualquiera de los dos, indistintamente. Pero para ganar hay que usar los dos.
Nada alrededor
En la superficie de este mundo la vida ha dejado de existir. Tan sólo máquinas controladas a distancia se mueven, y con no poca frecuencia vuelan en pedazos. El clima del juego está muy logrado: los escenarios son desolados y apocalípticos, además de muy detallados. La historia de Dark Reign 2 cuenta que antes de la existencia del malvado imperio y la fuerza de la libertad, dos ejércitos luchaban bajo las banderas de grupos enemigos.
Uno se hacía llamar la Jovian Detention Authority , que era quien reinaba e imponía las leyes, y el otro se conocía como los Sprawlers , un grupo de revolucionarios cuyo objetivo era quebrar la línea de poder y autoritarismo impuesta por sus rivales.
La facilidad de manejo de este producto es lo que hace la diferencia. Nunca, desde el Starcraft , fue tan fácil controlar nuestras unidades, y no sólo por la interfaz, sino por la sencillez con la cual se cambia el punto de vista de la cámara. Desde las alturas, desde atrás o desde los ojos de nuestras unidades podemos observar la batalla y dictar nuestras órdenes.
Tenemos 20 misiones (una con cada bando) más las dedicadas sólo al multiplayer. Una joyita. Requiere como mínimo un Pentium a 233 MHz con 64 MB de RAM, Windows 95 o 98, 550 MB de disco rígido, tarjeta aceleradora 3D opcional compatible Direct3D. El sonido y el video deben ser compatibles con DirectX 7.0.