Parece un chiste machista: el sitio australiano Finder, que se dedica a la comparación de promociones de tarjetas de crédito, presentó el prototipo de la cartera iBag . Según sus creadores, está diseñada para evitar que compradores compulsivos sucumban a la tentación de sacar, una vez más, la tarjeta de la cartera.
La cartera tiene un chip RFID para determinar cuántas veces salió la billetera de la cartera, un GPS que determina si el usuario se está acercando a un área con muchas tiendas, y un módulo GSM que permite enviar SMS alertando a otra persona que esto está sucediendo; un reloj bloquea el acceso a al cartera durante ciertas horas del día; todo está controlado con una mini computadora Arduino.
En Australia una de cada cuatro tarjetas de crédito tiene deudas impagas, dicen sus creadores, que aclaran que el concepto de la cartera es, en rigor, una manera de ilustrar los problemas que tienen la gente con compulsión a la compra, al tiempo que la usan para promocionar sus servicios para personas con problemas para mantener sus finanzas personales en orden.
Como en otras creaciones de financiamiento colectivo , la compañía primero pide a los interesados registrarse para determinar si hay suficiente interés en la compra de una cartera de este tipo, que tendrá un precio aproximado de 175 dólares estadounidenses.
