Nic.ar pasa a la órbita de la Secretaría Legal y Técnica

La entidad responsable de la administración de los nombres de dominio de Internet en Argentina NIC.AR dejará de estar bajo la responsabilidad de la Cancillería para pasar a la órbita de la Secretaría Legal y Técnica. La medida, anunciada en el Boletín Oficial en el decreto presidencial 2085 publicado el 12 de diciembre, sólo detalla el cambio administrativo del organismo, vigente desde el 10 del corriente mes.

NIC.AR no respondió de forma inmediata a las consultas realizadas por LA NACION sobre los motivos que llevaron al organismo a estar bajo la responsabilidad de la Secretaría Legal y Técnica.

El organismo es el punto de referencia obligatorio para el registro y administración de los dominios de Internet en Argentina, en coordinación con la Corporación de Internet para la asignación de nombres y números (ICANN, según sus siglas en inglés), encargada de mantener la gestión a nivel global de la infraestructura básica para el funcionamiento de la Red.

El pedido de registros a nivel local es un trámite gratuito, que mantiene ciertas restricciones o límites de hasta 200 dominios, una medida anunciada en 2009 por NIC.AR para evitar el abuso de inscripciones de direcciones de Internet para su posterior comercialización o subasta.

Con varias idas y vueltas

LA NACION consultó a Santiago Gini, titular de Cátedra de Derecho de la Tecnología de la Información y las Comunicaciones en la Universidad Austral, sobre la puja entre diversas secretarías y ministerios por quedarse con la administración de NIC.AR.

- Qué organismo debería ser el responsable de otorgar los dominios?
No es un punto libre de controversias. Incluso desde 1987, cuando la IANA (el organismo que luego pasó a ser parte de la actual ICANN) delegó la responsabilidad a la Dirección de Informática, Comunicaciones y Seguridad del Ministerio de Relaciones Exteriores Comercio Internacional y Culto (MRECIC). Mientras todo estaba cargo del MRECIC, la Secretaría de Comunicaciones, dictó en diciembre de 1999 la resolución 4536/99 en la que encomendaba al correo oficial la administración, altas y bajas del Registro del Dominio de Nivel Superior Argentina (AR), una medida que nunca se concretó dado que a los pocos días la misma secretaría dictó junto con la de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva una resolución conjunta que suspendía la 4536/99.

En agosto del 2000 luego del Decreto 252/2000, que había designado a la Secretaria para la Ciencia, la Tecnología y la Innovación Productiva como responsable del programa Internet para Todos, el MRECIC dictó la Resolución 2226 en la que sostenía que se había decidido transferir los servicios de NIC-Argentina a la Secretaría recién mencionada, algo que nunca sucedió.

-¿Quiénes serían entonces los más idóneos para la administración de NIC.ar?
-Creo que tanto el hoy llamado Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto como la SECOM tendrían más fundamentos. El primero por la vocación internacional de Internet y las problemáticas relacionadas con los nombres de dominio, así como porque uno de los objetivos principales del mencionado ministerio es entender en las relaciones con todos los países y los organismos internacionales.

Por su parte, la Secretaría de Comunicaciones podría buscar fundamentos en que Internet el principal medio comunicación además de que ya lo regula en otros aspectos.

¿Qué le parece la medida de trasladar las funciones de NIC.AR de Cancillería a la órbita de la Secretaría Legal y Técnica? - Por lo pronto es una medida rara. Si se analiza los 13 objetivos que la Secretaría Legal y Técnica de la Presidencia de la Nación tenía antes del decreto se puede notar fácilmente cierta relación y coherencia entre los mismos. Sin embargo, la incorporación del nuevo objetivo 14 tiene muy poco que ver con los 13 anteriores.

El decreto no detalla razones concretas que justifiquen o aclaren el cambio, simplemente refiere a un reordenamiento.

- ¿Es este el procedimiento que se adopta en la mayoría de los países?
En relación a la administración del ccTLD cada país es distinto. En la región podemos ver que hay tres modelos, los que la administración se encuentra en manos de empresas de telecomunicaciones (Uruguay), los que ponen a cargo a una universidad o centro técnico o de estudios (Chile) y los que conservan la administración en manos de algún organismo estatal, como ocurre en Argentina.

Tal vez sería positivo analizar la posibilidad de hacer una licitación para ver quién es el más idóneo.

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