"Era mi último día en París. Sabía lo del volcán de Islandia pero no tenía idea de las dimensiones del problema. Busqué mis cosas en la estación Montparnasse, donde había guardado mi equipaje para recorrer durante todo el día esa hermosa ciudad, y me dirigí a un hotel cerca del aeropuerto para pasar la última noche.
Después de cenar, una corazonada me dijo que fuera hasta el aeropuerto "Charles de Gaulle" y confirmara mis sospechas. Todos los vuelos estaban cancelados, el lugar estaba desierto. ¡Casi me muero! Una pantalla decía en francés: "Charles de Gaulle permanecerá cerrado hasta el domingo 19 a las 20.00 horas como mínimo". Igualmente, con pensamiento positivo, me fui a dormir pensando que iba a encontrar una solución para volver a casa.
Domingo 18 de abril de 2010
Mi cabeza estaba a mil por hora. De alguna forma tenía que llegar a Frankfurt. Busqué un mapa y comencé a planear cómo viajar por tierra. En Internet encontré el sitio de www.tgv-europe.es, donde figura la información sobre los horarios y los recorridos de trenes y ómnibus de larga distancia que recorren toda Europa..."
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