Rusia 2018: se dispararon las ventas de entradas

Ir al Mundial de Rusia no será tan fácil y accesible como fue en el de Brasil. La distancia, los precios elevados y el idioma incomprensible para la mayoría (los carteles están escritos en cirílico) hacen que caer como paracaidista con el allá veo en la valija sea un plan casi delirante.

Quizás sea el motivo por el que las ventas de entradas y paquetes hayan superado las expectativas previstas, según las agencias consultadas, sobre todo después del sorteo de las sedes.

Primer paso

Para empezar, lo primero será comprar las entradas. Como en los últimos mundiales, hay dos maneras.

La más económica y también más complicada, por cierto, es por medio de la web de la FIFA, que en diferentes fases adjudica entradas por sorteo.

La fase de ventas 1 ya se cerró. Ahora está vigente el período de ventas por sorteo aleatorio de la fase 2. Los que quieran entradas tienen tiempo de solicitarlas hasta el 31 de enero próximo en la web www.FIFA.com/tickets. Al final del período se hará el sorteo entre todas las solicitudes, sin garantía de conseguir lo que se pidió, si la demanda excede la oferta.

Luego habrá otra oportunidad de compra entre el 13 de marzo y el 3 de abril, en este caso por orden de pedido. Y la última oportunidad a partir del 18 de abril, también por orden de pedido.

Seguramente para los partidos de la Argentina habrá sorteo por la gran cantidad de solicitudes. En la web, los tres primeros partidos de la selección ya están marcados en rojo, con el cartel de alta demanda. En los últimos días, los pedidos de entradas los encabeza Brasil, seguido por Rusia y la Argentina.

La suerte loca

Si se solicitan las tres entradas de la primera fase, se puede conseguir una sola, dos, tres o ninguna. La suerte loca... Aunque vale la pena intentarlo por la gran diferencia de precios.

Por este sistema, las entradas para los encuentros de la primera fase cuestan entre 105 y 210 dólares, según la ubicación. También se puede solicitar entradas para octavos (entre 115 y 245 dólares), para cuartos (entre 175 y 365 dólares) y para la semifinal (entre 285 y 750 dólares). La final no está disponible para la venta por este sistema.

La otra manera de adquirir entradas, mucho más costosa, pero también mucho más sencilla y con la seguridad de la adjudicación inmediata, es por medio de las agencias de viaje.

En la Argentina hay tres agencias oficiales autorizadas, representantes de Mach Hospitality, la agencia de la FIFA, para vender entradas con el plus del servicio Hospitality, que incluye recepción y comida desde tres horas antes de cada partido y una hora después.

Las agencias argentinas son Tije Travel, Mundoreps y Rotamund, que a su vez las comercializan por medio de muchas agencias de viaje del país de manera oficial.

En este caso se puede comprar sólo las entradas, que incluyen el servicio en el estadio en una carpa contigua, y conseguir alojamiento por otro lado. En Moscú, donde conviene hacer base, los hoteles cuestan desde US$ 170 por noche para dos personas.

Es bueno recordar que los que tengan entradas deben presentar el Fan ID para entrar a los estadios. Este novedoso documento brinda además servicio gratuito en los trenes de alta velocidad los días de los partidos, por lo que se evitan los vuelos internos (ver recuadro). La Argentina, en este sentido salió favorecida con las ciudades sede: Moscú, San Petersburgo y Nizhni Novgorod, que se pueden unir perfectamente en tren.

Si se piensa comprar entradas por otros canales no oficiales (como reventa) es necesario recibir, además del ticket, el código para tramitar el Fan ID.

También las agencias comercializan los paquetes con servicios terrestres, que incluyen hotel y traslados en trenes de alta velocidad para los partidos, sin las entradas, con tarifas desde 6500 dólares por persona.

Los aéreos, el tercer eslabón de la cadena mundialista, se compran aparte y son el gran problema, porque los precios suben vertiginosamente y los aviones se completan rápido para los días previos al partido inaugural.

Para viajar pocos días antes del inicio del Mundial hay que pensar en pasajes de ida y vuelta a Moscú desde 1900 dólares en vuelos de más de 34 horas con dos escalas y desde 2400 dólares para viajes en menos tiempo y con una escala.

A través de las agencias autorizadas, las entradas a los partidos de la primera fase cuestan, cada una, desde 850 dólares. Pero para los partidos contra Islandia y Croacia (los estadios son más chicos) ya se agotaron las de esta categoría. Las tarifas siguientes son de 1650 y 2650 dólares por partido, según la ubicación.

Incluso ya se puede comprar la entrada para la semifinal y final por la friolera de 11.650 dólares, las dos entradas.

Sorpresa por las ventas

Para hacer números redondos, el aéreo, el paquete de servicios terrestres de 14 noches en hoteles tres estrellas, en base doble, traslados al hotel/aeropuerto y los días de los partidos en tren, más las tres entradas para los partidos de la primera fase, cuestan desde US$ 11.500 por persona.

La mayoría de los paquetes que se venden en la Argentina hacen base en hoteles de Moscú y completan con algunos días San Petersburgo, donde se juega el último partido de la fase de grupos. En nuestro caso, el primer partido se juega en Moscú, (contra Islandia, el 16 de junio). El 21, contra Croacia, en Nizhni Nóvgorod, que queda a 420 kilómetros de Moscú y el 26, la Argentina enfrenta a Nigeria, en San Petersburgo, a 700 kilómetros de la capital rusa, todos viajes que conviene hacer en tren.

“Desde el sorteo hubo un resurgimiento de las ventas, incluso desde la FIFA se sorprendieron por la cantidad de argentinos que compraron”, cuenta Héctor Berberian, gerente general de Tije Travel, una de las agencias oficiales, recién llegado de Rusia. Los viajeros particulares, en general compran las tres entradas de la primera fase y las empresas eligen los programas de un solo partido por la cantidad de días que implica. Para este Mundial en principio no se van a ofrecer viajes sólo para ver el partido y volver por la gran distancia.

A pesar de los precios exorbitantes, Berberian asegura que lo que primero vendieron son las entradas para la final: “Las primeras ventas fueron para la final. Ya se agotaron las entradas de 5850 dólares y ahora tenemos en venta las de 11.650, que incluye los partidos de semifinal y final”.

“Estamos sorprendidos con las ventas, –cuenta Gustavo Signorio, director de Mundoreps– ya se vendió el doble de lo que teníamos previsto al 31 de diciembre. Estos días se dispararon y se agotaron las entradas de US$ 850 para los partidos en Moscú y Nizhni Nóvgorod; todavía quedan para el partido en San Petersburgo”.

Después del sorteo reformularon los programas terrestres para alojar a los pasajeros unos días en Moscú y otros en San Petersburgo: “A diferencia del mundial anterior mucha gente aprovecha para conocer y hacer salidas turísticas, algo que no pasó en Brasil. Sería una pena ir a San Petersburgo sólo por el partido y no conocer la ciudad”, agrega.

Rusia sin dudas despierta un gran interés turístico, más allá de los goles de Messi que ya van a venir.

El carnet del hincha

Para el próximo Mundial, como una medida de seguridad extra, los asistentes a los estadios deberán presentar, además de la entrada, el Fan ID, un carnet oficial de identificación de los hinchas, sin el cual no podrán ingresar.

Además da la posibilidad de acceder a viajes gratuitos el día del partido en los transportes públicos como el metro. Los hinchas podrán viajar sin costo en trenes adicionales (serán más de 500 servicios) que realizan el recorrido hasta las ciudades sede, lo que requiere reserva previa. En la web www.transport2018.com (en inglés), ya se pueden reservar los viajes en tren si las entradas están compradas. Se eligen los partidos a los que se asistirán y desde el portal se muestra qué tren hay que reservar y tomar, tanto de ida como de vuelta... y gratis.

Este novedoso documento se tramita de manera personal en la web www.fan-id.ru y es necesario tener la entrada al menos a un partido comprada. Es gratuito.

Después de la inscripción en la Web, si así se prefiere, se puede pedir el retiro del carnet en la Casa de Rusia en Buenos Aires (Rivadavia 4266), para evitar hacerlo allá.