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Red Bull detectó el problema que derivó en el abandono de Max Verstappen en Melbourne
Tras los análisis y el respaldo del suministrador de motores (Honda), la escudería austríaca intenta perfilarse con optimismo hacia el Gran Premio de Imola
LA NACIONRed Bull vivió la gloria en 2021 con un triunfo cinematográfico en la Fórmula 1. La forma en que Max Verstappen le birló el título a Lewis Hamilton en las últimas vueltas de Abu Dhabi ya quedó grabada en las páginas inolvidables de la máxima categoría del automovilismo. Pero ahora, la escudería afincada en Milton Keynes atraviesa momentos de incertidumbre, con más puntos oscuros que aspectos positivos. Sucede que sus pilotos ya experimentaron tres abandonos: dos del neerlandés y uno del mexicano Sergio “Checo” Pérez. El campeón del mundo vigente lleva una campaña a puros altibajos: afuera en la cita inaugural en Bahréin, triunfo y 25 puntos en el bolsillo en Arabia Saudita y otro adiós prematuro en Melbourne.
Nadie imaginó ese último desenlace en Albert Park. El neerlandés había llegado al circuito australiano con el objetivo de acercarse a Charles Leclerc -actual puntero del certamen- y confirmar sus aspiraciones a revalidar el título. Aun en desventaja en la potencia respecto de Ferrari, Verstappen venía aferrado a la segunda ubicación, aunque la persecución al monegasco se terminó transformando en una pesadilla. Víctima de un problema mecánico y con el motor en llamas, en la vuelta 39 de las 58 previstas no le quedó alternativa que abandonar. La escena fue preocupante: el piloto pidiendo que apagaran el fuego de su RB18 y un regreso al paddock reflejo de la decepción. Sus palabras posteriores provocaron sorpresa: “Ya estamos a millas de distancia, así que no quiero ni pensar en la lucha por el campeonato en este momento, creo que es más importante terminar carreras. Porque hoy fue en general, simplemente otro mal día, otra vez”, sentenció, indignado.
Heartbreak for Max Verstappen in Australia 💔
— Formula 1 (@F1) April 10, 2022
An podium opportunity missed for the Dutchman after a strong showing ended prematurely with a car problem 😫#AusGP #F1 pic.twitter.com/DXeOAe1r4X
Verstappen insistió: “Tenemos que terminar las carreras. Fue un mal día, no podía pelear contra Charles. La situación es frustrante. Este tipo de cosas, si quieres pelear por el título, son inaceptables”, explicó. Hoy figura sexto en la tabla de posiciones, con 25 puntos, por detrás del británico Lewis Hamilton (28). Antes de la carrera en Melbourne, se observó a los mecánicos de Red Bull trabajando en la parrilla del auto del neerlandés. El director del equipo, Christian Horner, dijo que no creía que el problema del abandono estuviera vinculado con lo que descubrieron antes del Gran Premio. “Sabía que había un problema. Así que siempre iba a ser una incógnita terminar la carrera. Tienen que recuperar el coche y analizarlo. Es frustrante”, opinó el actual monarca.
Finalmente, después de exhaustivos análisis, Red Bull detectó el problema: la culpa fue de un vacío que se creó en el sistema de combustible, que impedía que la gasolina llegase al motor. La causa del abandono fue revelada a través de Helmut Marko, asesor del equipo energético, que entró en detalles para el sitio neerlandés ORF: “El problema no estaba en la unidad de potencia, sino en el suministro de combustible. La línea de combustible estalló bajo alta presión. Creemos que eso se debe al porpoising”. Con ese término, muy mencionado a partir de los cambios que hubo para esta temporada, Marko se refiere al rebote que sufren los monoplazas a alta velocidad en plena recta, por culpa del regreso del efecto suelo. Todavía, varias escuderías no lograron solucionarlo, pero es sabido que trae sus consecuencias: provoca un vacío en el sistema de combustible, que impide que la gasolina llegue al motor.
A juzgar por el rendimiento del RB18, el asesor austríaco es consciente de que para volver a ser candidatos al título y contrarrestar el envión de Ferrari, solo necesitan igualarse en fiabilidad frente a las máquinas del Cavallino Rampante, que apenas presentan debilidades. A Red Bull no le queda alternativa que apoyarse en la promesa de su suministrador de motores: “Honda nos ha dicho que podemos contar con que el problema se solucione antes de la próxima carrera”.
Ya no queda margen: desde este viernes, Italia será la próxima estación de la máxima categoría del automovilismo, con el Gran Premio de Emilia Romaña, en Imola. Será el primero de la temporada que incluya una carrera sprint, que se disputará el sábado. Leclerc lidera la clasificación con 71 puntos; todo un nuevo desafío para Red Bull, con la idea fija de recuperar el protagonismo perdido.
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