Sánchez Miño: "Tengo que jugar y sumar donde sea"

Boca salió campeón del Apertura 2011, se ganó su lugar en la Copa Libertadores y para este semestre se sumó la competición por la Copa Argentina. El tema del recambio del equipo xeneize ha estado en foco permanentemente. Uno de los lugares a reforzar era el lateral izquierdo y buscar un sustituto de Clemente Rodríguez. Pero Julio Falcioni se las ingenió con la rotación de Facundo Roncaglia (puede jugar en los dos laterales), Franco Sosa y el propio Clemente. En los partidos de pretemporada Juan Sánchez Miño ocupó esa posición, incluso ante Central Córdoba, el miércoles pasado, lo hizo también. Mostró seguridad, muy buen trato de pelota, criterio táctico y pegada. Pero el juvenil es volante por la izquierda.

Aquellas virtudes lo hicieron debutar el 5 de diciembre de 2010, reemplazando a Matías Giménez, con Roberto Pompei como DT; fue 1-0 ante Quilmes, con Leonardo Madelón en el banco cervecero. Ya con Claudio Borghi en el banco del equipo de la Ribera jugó algunos partidos en la reserva de doble 5 .

Ayer pudo jugar desde el arranque por primera vez en el campeonato local y en el puesto que más conoce, dónde se siente más cómodo; y entregó un muy buen rendimiento. El volante, de 22 años (mide 1,77 y pesa 78 kilos), hizo su primer gol en primera y mostró estar a la altura de lo que Boca pretende, un recambio de calidad para los experimentados y consagrados. Sabe que el aporte al plantel lo debe hacer donde se lo necesite: "En un club tan grande tengo que jugar y sumar donde sea". Y agregó: "Estoy muy feliz de haber aportado algo para el triunfo de Boca". Tiene el lugar y la confianza del plantel. "Los chicos hacen un trabajo muy bueno; tienen un futuro enorme y una calidad increíble", decía Pablo Mouche elogiando a Sánchez Miño después del partido.

Su zurdazo cruzado, a los 13 minutos del segundo tiempo, le dio a Boca la posibilidad de ponerse en ventaja. "Lo vi a Silva que me pasaba por atrás, y cuando el defensor se abrió, le pegué. Después rematé otra vez porque me sentí con confianza. El árbitro (Sergio Pezzotta) me saludó después del gol. Me acordé de mi familia y amigos".

Su quite sobre Néstor Ortigoza a los 41 del segundo tiempo, y con San Lorenzo jugado, le abrió el camino a Boca para ampliar la ventaja. Con la lesión de Nicolás Colazo se le abre un nuevo horizonte a Sánchez Miño, el de volante por la izquierda, puesto al que le conoce las mañas y sabe sacarle el mejor rédito.

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