Argentinos consiguió un agónico triunfo ante Vélez, que le da aire en su lucha por mantener la categoría

No importa cómo ni por qué, no es tiempo de detenerse en el análisis. No hace falta más que convencerse de que es posible, aun cuando la empresa luce imposible. Es cuestión de comprender que este inestable fútbol argentino es capaz de dar señales en medio de la más profunda oscuridad. No hay calculadora ni promedio que sane la herida, pero alivia el dolor. Ahí va Argentinos , lastimado, pero con el orgullo intacto para intentar quedarse en primera. En su casa dio una muestra de carácter, ante uno de los equipos que mejor juegan por estas tierras. Y un poco por virtud propia, y otro tanto por absoluta complicidad de los de Liniers, se quedó con una victoria por 2-1 que le llena de aire los pulmones.

En función de las necesidades, sólo los muchachos de Claudio Borghi demostraron entender qué debían hacer para lograr su objetivo. En cambio, los de José Flores estuvieron demasiado lejos de ser ese conjunto ordenado y vertical que suele encantar. En realidad, Vélez mostró los síntomas de todos los afectados a la lucha por el cetro doméstico: ciclotimia. Argentinos fue superior en casi todo el encuentro y fue inteligente tácticamente, aunque le faltó jerarquía individual para resolver con más contundencia.

Los nombres de Domínguez, Cubero, Papa, Pratto o Zárate eran la marquesina de un duelo que se presumía como otra función de Vélez . Pero lucieron apagados, muy alejados de sus mejores versiones; en el caso de los defensores, la imagen resultó hasta determinante en el resultado. Argentinos, con la modestia de apellidos como los de Vittor, Serrano o Lenis, en especial este último, complicó todo el tiempo al equipo que prometía ser el protagonista. Y tanta diferencia se suponía, que en la Paternal estaba instalada una versión de posibles problemas en caso de una caída del equipo de Borghi.

Sin embargo, el equipo que asumió el protagonismo fue aquel por el que nadie apostaba ni una moneda. Y lo ganó desde la humildad y el deseo de mantenerse en la categoría. Porque ganaba con un gol de Ramírez, se perdió de estirar la ventaja en tres oportunidades –dos veces en los pies de Ramírez y otra luego de una gran acción de Lenis–, sufrió con el empate de Nanni y se le inundaron los ojos de emoción cuando, en la última bola de la tarde-noche, Cubero dejó vivo el balón en el centro del área y Barzola resolvió con mucha frialdad junto a un palo de Sosa.

Intenso y con un alto contenido emocional, el partido dejó un Vélez desorientado y sin respuestas, y a Argentinos gritando con el alma que quiere quedarse en primera.

FIN DE LA MALA RACHA. El conjunto de La Paternal volvió a ganar después de siete fechas, ya que no lograba imponerse desde la 5ª fecha, cuando superó a Arsenal por 2-1. Desde entonces acumulaba cinco empates y dos derrotas.

CON BUEN PROMEDIO. El arquero de Argentinos, Nereo Fernández, apenas recibió 5 goles en 11 partidos, por lo tanto, es el único guardavalla del torneo que tiene un promedio menor a un gol cada dos partidos disputados.

AFUERA ES MÁS DIFÍCIL. El conjunto de Liniers no tiene un buen andar fuera de su casa. De las cinco derrotas que sufrió en el Final, cuatro fueron como visitante, ante Lanús (2-3), Newell’s (1-4), Rafaela (1-3) y Argentinos (1-2); sólo derrotó a Arsenal (3-1) y a Olimpo (2-1).

"EL TÉCNICO AGARRA TODA LA PRESIÓN". El colombiano Reinaldo Lenis fue la figura de Argentinos y explicó con mucha claridad lo que representó el triunfo conseguido frente a Vélez: "Con la victoria sacamos la furia que teníamos dentro porque no se nos venían dando los resultados. Es una alegría muy grande. Este club se lo merece. Sabíamos que Vélez era uno de los mejores del torneo y jugamos de igual a igual. Ellos, cuando atacan, se desprotegen atrás y lo aprovechamos". Y respecto a la situación en la que se encuentran, comentó: "La verdad es que el técnico agarra toda la presión y dice que nosotros no tenemos nada que ver. Eso nos da mucha confianza".

FLORES: "NO NOS BAJAMOS DE NADA". A pesar de haber mostrado una imagen muy deslucida, el DT de Vélez, José Flores, dio señales de fortaleza después del golpe sufrido en la Paternal: "Creo que Argentinos jugó mejor y fue uno de nuestro peores partidos. No nos bajamos de nada, vamos a seguir peleando. El martes tenemos revancha en un torneo que es palo y palo. Se viene Quilmes y tenemos que ganar para seguir en la lucha".

El gol de Ramírez

El empate de Nanni

El gol de Barzola

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