BAHÍA BLANCA.- Con escaso fútbol, pero con dos jugadas certeras, Olimpo superó a Quilmes 2 a 1. El equipo cervecero no supo cómo lastimar a los bahienses en todo el partido. Fue un partido muy friccionado, con entradas fuertes: Luis Álvarez, el árbitro, mostró cinco amarillas, pero pudieron ser más.
Olimpo terminó el primer tiempo con la tranquilidad de los dos goles, ambos convertidos a distancia. Primero, el de Adrián Martínez, que pateó sobre la línea del área grande a los 28; luego, el del renovado Mauricio Cuero, que disparó desde unos diez metros mas allá del área cuando la primera parte se terminaba.
En el equipo visitante se destacaron Sarmiento, Klusener y Zacaría, intentando llegadas que fueron frustradas por la defensa o el arquero aurinegro. Braña, por su parte, fue importante gracias a sus pelotas para asistir a los delanteros.
El segundo tiempo arrancó con un remate de Gil que Benítez, el arquero de Quilmes, contuvo sobre la línea; luego, las imágenes de la televisión mostraron que la pelota había ingresado en el arco. Se protestó poco y Perazzo miró con frialdad al línea, que tuvo que determinar si era o no el tercer tanto de Olimpo. Álvarez no lo convalidó.
A los 6, Sills también llegó con un centro a las manos de Benítez y a los 8, Parnisari probó al arco. Eran las llegadas de Olimpo. Pero ya estaba Cáceres en Quilmes: él fue uno de los que inquietaron a los locales. El segundo ingreso en Quilmes, Adrián Fernández, fue otro acierto del DT Quatrocchi. A los 34 minutos, y de cabeza, el delantero sorprendía a Champagne y sumía a Bahía Blanca en el silencio con el gol del descuento.
Olimpo se retrajo. Vinieron los cambios del local. El más cuestionado fue la salida de Cuero, una de las figuras. Pero el resultado no cambió: con la victoria, el local abandonó el último puesto, en el que ahora dejó justamente a su vencido.
