Accidentes, excesos y asesinatos: las trágicas historias de celebridades que murieron en la cima de su carrera
A pesar del increíble talento y un futuro cargado de promesas, estos artistas no pudieron escapar a un trágico final que los alcanzó antes de los 45 años
La fama viene acompañada de una gran cantidad de lujos y privilegios. Fiestas, viajes, ropa cara y autos de alta gama son algunas de los aspectos más llamativos del éxito. Pero, para muchos artistas, la mejor parte es la posibilidad de compartir su arte con el mundo. Sin embargo, no importa cuánto dinero o renombre tenga una persona, nadie puede escapar a la muerte. Y, en el caso de estos artistas, sus prolíficas carreras quedaron truncas antes de cumplir 45 años a causa de enfermedades, adicciones o, simplemente, la mala suerte de estar en el lugar y el momento equivocados.
La muerte de Chadwick Boseman fue una dura pérdida no solo para los fanáticos de los cómics sino también para la industria del cine en general. El actor oriundo de Carolina del Sur se destacó por múltiples roles en películas y series pero alcanzó la fama internacional gracias a su interpretación de Pantera Negra, un personaje destacado en el Universo Cinemático de Marvel.
Su muerte fue tan triste como inesperada. Boseman partió a los 43 años el 28 de agosto del 2020, a causa de un cáncer de colon que le fue diagnosticado en el 2016 pero que decidió mantener oculto del ojo público. Según informó su familia al comunicar la dolorosa noticia, el artista había atravesado varias operaciones y quimioterapia en privado durante los últimos tiempos. Luego de su funeral, se estrenó la última película que protagonizó, Ma Rainey’s Black Bottom, gracias a la que ganó un galardón póstumo en los Óscar del 2021.
La muerte de Naya Rivera y de Cory Monteith, a pesar de que sucedieron con varios años de diferencia y por causas diferentes, fueron atribuidas por los fans a la “maldición de Glee”. La reconocida serie creada por Ryan Murphy y transmitida por Fox fue un éxito rotundo. Pero, tras su final, muchos de sus personajes principales vivieron trágicos sucesos.
Cory tenía 31 años el día que su corazón dejó de latir y estaba a punto de casarse con Lea Michele, su coestrella en Glee y quien interpretó a su novia dentro de la ficción. El joven había batallado contra las adicciones gran parte de su vida y esa fue la causa de defunción. Los medio reportaron muerte por “una intoxicación por mezcla de heroína y alcohol”.
La muerte de Naya Rivera ocurrió el 8 de julio del 2020, siete años después que su compañero de set. El caso conmocionó al mundo entero ya que estuvo envuelto en un misterio que culminó en un desdichado descubrimiento. Todo comenzó con la aparición de su hijo de cuatro años dormido y solo en un bote que flotaba en lago Piru, California.
Luego de cinco días de intensa búsqueda y toneladas de especulaciones sobre los hechos, las autoridades encontraron el cuerpo sin vida de Rivera, su madre. Según el relato de la criatura, ambos nadaban cuando ella lo subió de golpe a la embarcación. Al mirar para atrás, vio como Naya se hundía. Nunca más volvió a la superficie.
Selena Quintanilla tenía 23 años en el momento en el que una bala le arrebató la vida. A tan corta edad, la cantante mexicana ya era un fenómeno musical que había logrado ganarse el amor de un incontable número de fans. Fue justamente una de ellos quien sostuvo el revólver que la asesinó.
La reina del Tejano, como se la conocía popularmente, estaba a punto de dar el gran salto al mercado de habla inglesa cuando comenzaron a surgir los problemas con Yolanda Saldívar, directora del club de fans oficial y, más importante, amiga de Selena.
En 1995, a la autora de “Como la flor” le informaron que su colega (Saldívar trabajaba en la marca de ropa de la cantante) había estafado admiradores y que le había robado a la artista una importante suma de dinero.
Selena se acercó al hotel donde Yolanda se hospedaba para discutir la situación, con el fin de recuperar una serie de documentos relevantes. En medio de una violenta pelea, Saldívar le disparó en el hombro. Horas más tarde, la cantante falleció y su asesina fue detenida por la Policía.
La última muerte sigue, a más de 50 años de haber sucedido, envuelta en controversia. Muchos la aman, otros la odian y existe un gran debate en torno a quien es el verdadero responsable de su fallecimiento. Este es el caso de Marilyn Monroe, la cara de la época dorada de Hollywood y tal vez la actriz más famosa de la historia.
El 5 de agosto de 1962, una empleada de la superestrella entró a su habitación y se encontró con un horroroso cuadro. La artista estaba acostada en su cama boca abajo, completamente desnuda y rodeada de una incontable cantidad de botellas vacías de antidepresivos. Marilyn estaba muerta. El resultado de la autopsia determinó que que la actriz de Los caballeros las prefieren rubias se había autoadministrado los medicamentos y que, por ende, sufrió una sobredosis.
El caso fue caratulado como un suicidio y las pruebas se reunieron solas: Monroe sufría de depresión hacía años y, durante sus últimos meses, había presentado un comportamiento errático y cambiante que había requerido el acompañamiento de un psiquiatra.
Pero, tiempo después, comenzaron a correr las especulaciones de que podía haber algo oculto detrás de la trágica muerte de quien hoy en día es un ícono de la cultura pop. Era un secreto a voces que Marilyn era amante de John F Kennedy, presidente de los Estados Unidos, y su hermano, Robert F Kennedy, funcionario público. Algunas teorías sostienen que en realidad fueron ellos quienes la mandaron a matar por miedo a que revelara su relación o algún secreto de Estado que logró enterarse por accidente.
La realidad es que la muerte (o el asesinato) de Marilyn Monroe permanecerá como un misterio sin resolver y se suma a la larga lista de celebridades que, ya sea por enfermedad, adicción o violencia, fueron arrancadas de este mundo demasiado pronto.
A la lista de estos artistas se suman también muchas otras figuras. Paul Walker, la estrella de Rápido y Furioso que murió irónicamente en un accidente de auto; Brittany Murphy, que falleció a los 32 años a causa de una neumonía y Heath Ledger, que encontró el final de su vida a los 28 en pleno ascenso de su carrera y a causa de “abuso de medicamentos recetados o uso indebido e intoxicación combinada de drogas”.
Otras estrellas que no superaron las tres décadas fueron Brandon Lee, hijo de Bruce Lee, que murió en un trágico incidente con un arma en el set de la película El Cuervo; y River Phoenix -hermano del actor Joaquin Phoenix- que a 23 años murió a causa de una sobredosis.
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