Perfumes low cost

Las aguas y los aceites perfumados y las colonias están pasando al primer lugar de las vitrinas. Cada vez se usan más y, en no pocos casos, en reemplazo de los perfumes. ¿Una tendencia que crece o una moda coyuntural? El perfumista Bernardo Conti descubre esta tendencia y oferta, y cuenta por qué y qué marcas lo lideran.

Uso creciente . Existe un enorme gap entre los perfumes de diseñador, de precios más o menos altos y lujosos, y las colonias y aguas de baño de uso diario. Un espacio vacante que mediante innovaciones tecnológicas en materia de química cosmética se cubrió con productos que, además de perfumar, lavan, hidratan, dan brillo a la piel y facilitan los masajes. No menos importante es la incidencia de la gran crisis mundial que surge desde 2008, que hizo florecer la aparición de productos más económicos con valores agregados: geles, aceites, jabones, espumas. Estos productos perfumados hacen del cuidado personal un acto gratificante, con experiencias de aplicación de minutos en vez de segundos. Esta es una tendencia que comenzó a verse a fines de los 90.

Conceptuales o experienciales. Uno de los principales lugares es Estados Unidos, donde las tiendas de perfumes conceptuales o experienciales se cuentan por cientos en firmas que lanzan colecciones de aguas y colonias con aromas a frutas, flores, hierbas, especias, maderas, entre otras esencias.

Aguas y aceites vs. perfumes . No son irreemplazables, pero son más accesibles. Y se destacan porque brindan una experiencia de uso agradable y se convierten en una buena opción de regalo.

Alcance . Todavía poco en comparación a la gran oferta, porque involucra grandes movidas logísticas, importaciones y más. Pero lo que sí se ve claramente es la aparición de tiendas locales que trabajan esta idea. Por otra parte tienen gran presencia en las compañías puerta a puerta. Y su influencia está a la vista en productos de consumo más masivos. El aumento de perfume se nota, y mucho, sobre todo en jabones, geles de ducha y lociones corporales.

Notas . Las más exitosas son las colecciones florales en bouquets o más simples; las frutadas son muy elegidas por los más jóvenes y casi siempre con mucho éxito de lanzamiento, pero de vida corta en los mercados. Le siguen las notas golosas, como vainilla, chocolate, canela y hasta lemon pie.

Los favoritos . Frescura extrema y agradable, que huele a bienestar, así son los destacados de Conti. El savoir faire de las aguas perfumadas es de Roger&Gallet, que cuenta con una variada colección de aguas perfumadas. A base de hierbas y plantas cultivadas de manera natural es la oferta de la Officina Profumo-Farmaceutica di Santa Maria Novella, en Florencia, una de las farmacias más antiguas del mundo. Demeter Fragance Library amplía el uso de la fragancia con más de 250 aromas inspirados en objetos cotidianos y experiencias, bien captados en aguas y aceites. Acqua di Parma, todo un laboratorio de esencias que marcó esta tendencia a principios del siglo pasado con sus colonias y aguas emblemáticas del norte de Italia. Además de estos clásicos hay otras que se posicionan: Lush, una marca de cosmética natural vegana de origen inglés; la americana bien fashion Victoria Secret, y Bath & Body Works, tres de las que ofrecen estos productos en ascenso. Entre las marcas de lujo vale citar las eau de Guerlain, con Les Eaux elaboradas con extractos florales, y Aqua Allegoria, con cinco hierbas frescas. Además ofrece otros productos, como desodorantes en spray, lociones corporales y geles de ducha de Insolence, Idylle, L’Instant y Champs-Elysées. Y mucho más. Otra de las firmas de alta gama es Dior, y se inscribe en esta tendencia con una loción corporal y gel de ducha de Hypnotic Poison; una loción perfumada de Dune; otra loción fundente, desodorante y gel satinado de Miss Dior, y una leche corporal y aceite seco para el cuerpo de J’Adore.

• Para el relax. Aceite de Sisley, $ 494
• Musc Sandalo. Natura Aguas, $ 99
• Aceite goloso. Gula, de Elementos Esenciales, $ 52
• Floral ligero. De la colección Les Exclusifs, $ 895
• Aguas de la Provenza. L’ Occitane, $ 376
• Agua de tratamiento. Dahlia Noir, de Givenchy
• Splash botánico. Naté Naturals, de Revlon $ 30