El look más jugado. ¿Qué dijo la diseñadora elegida por María Becerra sobre el llamativo vestido de los Grammy?

Una vez más María Becerra se jugó por la moda lenta, diseñada en el país y desarrollada con materiales autóctonos. Y lo hizo nada más y nada menos que en la reciente edición de los premios Grammy 2022. “La nena de Argentina” –tal como la denominación del hashtag ultra replicado en las redes sociales– cantó con J Balvin en el escenario montado en el MGM Grand Garden Arena Las Vegas, previa recorrida por la red carpet con un total look de Emilia Velasco, diseñadora nacida en Chaco.

“Parecía una ninfa de nuestra tierra”, dice Velasco, sobre el espectacular vestido que creó especialmente para Becerra. El mismo que inquietó y despertó centenares de comentarios, a la largo y lo ancho del planeta terrenal y también virtual; es un diseño de línea recta, translúcido, con escote en la espalda, intervenido con sogas confeccionadas ciento por ciento en algodón producido por la cooperativa chaqueña Inimbo. Sublimado con una pechera artesanal, mutable, que funciona como amuleto protector, realizada a mano, mediante las técnicas del crochet, macramé y anudados.

“Inevitablemente el cuerpo humano toma una postura diferente; los hombros van hacia atrás, el corazón adelante, y el mentón al frente”, reflexiona sobre la performance poética que propone la pieza que la artista llevó sobre el plexo, por la que la diseñadora chaqueña no paró de recibir llamadas, algo que además provocó un crecimiento exponencial en la cantidad de sus seguidores en Instagram.

Con diez años de trabajo en su marca Velasco de Autores, y solamente uno y medio de haberse instalado en Buenos Aires –en plena pandemia del Covid-19– Velasco ya vistió a Becerra en diferentes oportunidades: la entrega de los Premios Gardel 2021 y una producción para la portada de la revista Marie Claire. Antes desfiló en 2014 en Santiago de Compostela, España, y en 2018 en el marco del Mercado de Industrias Creativas de Brasil.

“Le digo ‘diseño a la carta’”, y alude a la metodología que encara cuando tiene que desarrollar la ropa que vende en el local físico Panorama Store y en la tienda virtual Roomie Design. Esto quiere decir que no sigue a rajatabla las temporadas estipuladas de acuerdo al calendario convencional de la moda, sino que trabaja en torno al pre order: diseña de acuerdo a los pedidos de los clientes. Eso sumado a que comparte sus conocimientos en base al llamado “código abierto”.

Al mismo tiempo, sus prendas la trasladan a su terruño, cuando jugaba con retazos de telas, y pensaba detenidamente en cómo vestir a sus muñecos, aunque, sobre todo, de qué evento formarían parte. “Una familia de mujeres al frente”, expresa de la organización matriarcal donde se crió, con fuerte presencia de su abuela paterna, Ana, descendiente de españoles, quien vivió en el campo chaqueño, e Isolina, su abuela materna, paraguaya, quien se las ingeniaba haciendo bustiers con bolsas de azúcar, por medio del rescate y la optimización de recursos, tal cual hoy lo hace su nieta. También de Elena, su mamá, quien inicialmente trabajó como modelo hasta que se recibió de abogada.

La impronta de los diseños de Velasco está, sin dudas, en sintonía con el paradigma del lujo sustentable cada vez más difundido en la escena fashion local e internacional, que pone el ojo en los saberes ancestrales, los materiales orgánicos y un modo de hacer guiado por un ritmo desacelerado, que contempla el entorno social, cultural y natural. “Llegó a la alfombra roja vestida de algodón argentino, industria nacional ¡Decime si ese no es un acto político!”, enfatiza Velasco sobre la elección que hizo Becerra de su atuendo. “Entiendo que es un discurso compartido, una decisión, de caminar de esa manera”, sintetiza.