Amenazas a la prensa. Fuerte repudio a la grave intimidación del narcotráfico a periodistas y medios de Rosario
Adepa, Fopea y la Fundación LED manifestaron su preocupación por el ataque a la labor de los medios y sus trabajadores e instaron a las autoridades a proteger la libertad de expresión; el Sindicato de Prensa de la ciudad, además, se reunió con la fiscal regional y mañana mantendrá una reunión con el ministro de Seguridad de Santa Fe
LA NACION
Representantes de los trabajadores de prensa, de las empresas del sector y organizaciones que velan por la libertad de prensa como un puntal de la democracia manifestaron de forma unánime su repudio a la amenaza contra la labor periodística desplegada en una tela colgada en las instalaciones del Canal 5 de Rosario y rubricada por la mafia que encarnan las bandas narco que tienen bajo su puño a la ciudad, jaqueada por las extorsiones, las balaceras y los asesinatos de sicarios.
La Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (Adepa) alertó “por la grave amenaza a medios y periodistas rosarinos por parte de bandas de narcotraficantes que operan en esa ciudad”.
“Lo sucedido en el día de la fecha en las instalaciones de Telefé Rosario debe comprometer a todos los poderes del Estado nacional y de la provincia de Santa Fe en la defensa de la libertad de expresión y en la efectiva protección a medios y periodistas”, expresó, en un comunicado.
Recordaron que en su reciente informe sobre libertad de prensa, difundido durante su asamblea anual, Adepa señaló: “Tenemos que elevar la voz por el riesgo que implica para la integridad física y la seguridad personal de periodistas y medios el fenómeno creciente del narcotráfico y otras formas de crimen organizado en el país”.
También afirmaron que la entidad que agrupa a las empresas de medios del país “está comprometida, junto con otras organizaciones locales y regionales, a bregar por el efectivo compromiso de los poderes del estado y las fuerzas de seguridad en el combate a este flagelo y en la protección de quienes lo investigan y denuncian”.
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), en tanto, advirtió que las “amenazas a la prensa en Argentina” son “una muestra de la alarmante presencia de bandas narcotraficantes en varios países de las Américas”.
En el mismo sentido, el Foro de Periodismo Argentino (Fopea), expresó “su enérgico repudio a la amenaza registrada contra los periodistas de Rosario” y se solidarizó con ellos. “Fopea exhorta a las autoridades provinciales a esclarecer este hecho y a garantizar la integridad física de los trabajadores de prensa, en particular, en una ciudad en la que la violencia criminal agrega un contexto de extrema hostilidad y desprotección para los colegas”.
Reuniones y denuncias
El Sindicato de Prensa Rosario (SPR) se reunió con la fiscal regional María Eugenia Iribarren para plantearle “su preocupación por el cartel colgado en las rejas de Canal 5 (Telefé Rosario)”.
El gremio pidió que se lleve adelante la investigación “con la mayor celeridad” y “hasta las últimas consecuencias”. Informaron que el gobernador santafesino, Omar Perotti, se comunicó con representantes del SPR y que mañana tendrán una reunión con el ministro de Seguridad, Rubén Rimoldi, por esta cuestión.
“Nuestra organización denunciará esta amenaza ante el Ministerio Público de la Acusación y pedirá la urgente investigación del hecho, que crea zozobra entre trabajadores de prensa y se suma al malestar generado por el mensaje violento y estigmatizador que se conoció el 25 de septiembre desde la cuenta de [ Twitter de] @lmmonteil”.
Se referían al tuit en el que el abogado local Leopoldo Monteil afirmó: “El mundo será un lugar vivible cuando todos los días se ejecute un periodista; son el cáncer de la humanidad”. El Colegio de Abogados de Rosario, a través de su presidente, Lucas Galdeano, también había expresado su repudio al contenido de ese mensaje a través de la red social de alcance masivo.
Al respecto, el SPR cuestionó al fiscal rosarino Darío Cimino por haber desestimado la denuncia del sindicato sobre este tema, al considerar que aquella afirmación de Monteil no constituía delito.
El SPR adelantó que apelará el dictamen del representante del Ministerio Público de la Acusación (MPA) “ya que entiende que el contenido no solo constituye una expresión de odio insostenible en el contexto rosarino, sino que puede encuadrarse en el delito de incitación a la violencia del Código Penal, que establece: ‘Será reprimido con prisión de tres a seis años el que públicamente incitare a la violencia colectiva contra grupos de personas o instituciones, por la sola incitación’”.
En su denuncia, el gremio había expresado que aquel llamado a la “ejecución” del colectivo de trabajadores de la comunicación “es gravísimo si se considera que la naturaleza de la labor periodística supone una fuerte exposición pública la que, además, se da en una ciudad donde se producen asesinatos a diario y se atenta contra instituciones públicas y privadas”.
También recordaron que, “ante la gravedad del contenido del mensaje, es obligación del Estado velar por la seguridad de su población, investigar la comisión de posibles delitos y, eventualmente, aplicar las sanciones que correspondan”.
Libertad de expresión
En tanto, la Fundación LED (Libertad de Expresión + Democracia) manifestó “su profunda preocupación por las graves amenazas a la prensa por parte de bandas narco criminales en la ciudad de Rosario” y se solidarizó con los periodistas, trabajadores de prensa y medios de Rosario.
“Este tipo de amenazas constituye una clara limitación al ejercicio de la libertad de expresión y de prensa y al derecho al acceso a la información por parte de los ciudadanos, consagrados en nuestra Constitución Nacional y en los Tratados Internacionales que la integran”, expresaron, en un comunicado.
“No es la primera vez que medios y trabajadores de prensa son amenazados por el narcotráfico en la ciudad de Rosario y en otras ciudades de nuestro país […] En ese contexto es fundamental que las autoridades de gobierno lleven adelante todas las medidas para garantizar la seguridad personal de los periodistas y la labor libre e independiente de la prensa”, afirmaron.
Recordaron, entre los antecedentes, que en noviembre de 2014 el corresponsal de LA NACION en Rosario, Germán de los Santos, recibió amenazas telefónicas, que en agosto de 2015 un grupo de periodistas de Canal 5 y Canal 3 fueron agredidos mientras realizaban una nota, y que en octubre de 2017 De los Santos y Hernán Lazcano fueron amenazados mientras presentaban un libro sobre la banda de Los Monos.
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