El TJUE defiende el estatus de refugiado para mujeres en riesgo por creer en principios de igualdad de género

El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ha defendido este martes que se contemple el estatus de refugiado para mujeres que habiendo crecido y sido educadas en principios y valores de igualdad de género corran el riesgo de persecución si regresan a su país de origen en donde estos valores no estén protegidos.

El dictamen del Alto Tribunal europeo responde al caso de dos adolescentes iraquíes a las que se les ha denegado la protección internacional a pesar de que residen en Países Bajos desde 2015 y recurren alegando que han adoptado las normas, valores y comportamientos de las jóvenes de su edad en esa sociedad.

Las jóvenes advierten de que si regresan a Irak serán incapaces de acatar las normas de una sociedad que no reconoce a las mujeres y niñas los mismos derechos que a los hombres, lo que las deja "expuestas a un riesgo de persecución" debido a la identidad que se han forjado en los Países Bajos.

El juzgado neerlandés que debe resolver el caso pregunta al Tribunal con sede en Luxemburgo cómo aplicar la directiva sobre protección internacional que prevé el estatuto de refugiado para los casos de persecución de cualquier nacional de un tercer país por motivos de raza, religión, nacionalidad, opiniones políticas o pertenencia a determinado grupo social.

En su sentencia, Luxemburgo considera que puede considerarse que las mujeres que se identifiquen con valores fundamentales de igualdad entre hombres y mujeres tras su estancia en un Estado miembro "pertenecen a un determinado grupo social" que pueda ser identificado como "motivo de persecución" y justifique el reconocimiento del estatuto de refugiado.

El fallo advierte, además, de que cuando quien solicita la protección es una persona menor edad menor edad entonces las autoridades nacionales deben tener en cuenta necesariamente su interés superior en el marco de un examen individual de su expediente para pedir el estatus de refugiado.

Además, para evaluar una solicitud de protección internacional basada en un motivo de persecución como "la pertenencia a un determinado grupo social", puede tenerse en cuenta una prolongada estancia en un Estado miembro, sobre todo si coincide con un período durante el cual ha forjado su identidad un solicitante menor de edad.