laboristas británicos llegarán al poder con amplia mayoría, muestran sondeos a boca de urna
(Actualiza con detalles, citas de Starmer)
Por Andrew MacAskill, Elizabeth Piper y Alistair Smout
LONDRES, 4 jul (Reuters) - Keir Starmer se convertirá el viernes en el próximo primer ministro británico, gracias a que su Partido Laborista va a obtener una amplia mayoría en las elecciones parlamentarias, mostró un sondeo a boca de urna, que pronosticaba que los conservadores de Rishi Sunak sufrirían una derrota histórica.
Los laboristas de centro-izquierda se encaminaban a hacerse con 410 de los 650 escaños del Parlamento, un asombroso cambio de tendencia respecto a hace cinco años, cuando sufrieron sus peores resultados desde 1935.
El resultado daría a los laboristas una mayoría de 170 escaños y pondría fin a 14 años de un gobierno conservador cada vez más convulsionado.
"Esta noche, la gente de aquí y de todo el país ha hablado y está preparada para el cambio, para acabar con la política del rendimiento, para volver a la política como servicio público", dijo Starmer tras ganar su escaño en Londres.
"El cambio empieza aquí mismo. Porque esta es su democracia, su comunidad y su futuro. Han votado. Ahora es el momento de que cumplamos".
Starmer llegará al poder con una desafiante lista de tareas, con una economía aletargada, unos servicios públicos devastados y un nivel de vida a la baja, factores que contribuyeron a la caída de los conservadores.
Las proyecciones apuntan a que el partido conservador de Sunak solo obtendría 131 escaños, el peor resultado electoral de su historia, ya que los votantes les castigaron por una crisis del costo de la vida y años de inestabilidad y luchas internas que han visto a cinco primeros ministros diferentes desde la votación del Brexit de 2016.
Los centristas liberaldemócratas conseguirían 61 escaños, mientras que el partido populista de derechas Reform UK, liderado por el activista del Brexit Nigel Farage, ganaría 13, mucho más de lo esperado.
Los resultados de más de 120 escaños confirmaron que los laboristas y los demócratas liberales ganaban terreno a los conservadores, mientras que Reform también se hizo con su primera victoria y desplazó a los conservadores al tercer puesto en muchas zonas.
"Reform lo ha hecho claramente bien esta noche y sé que la reacción de algunos de mis colegas será que deberíamos dar un bandazo a la derecha", dijo a Reuters un legislador conservador, que no quiso dar su nombre. "Pero los laboristas han ganado estas elecciones en el centro y tenemos que recordar esa lección".
En general, el sondeo a boca de urna sí sugería que los votantes británicos habían desplazado su apoyo hacia un partido internacionalista de centro-izquierda, a diferencia de Francia, donde el partido de extrema derecha Reagrupamiento Nacional (RN) de Marine Le Pen logró un avance histórico en las elecciones del pasado domingo.
No sólo se preveía un desplome de los conservadores. Se pronosticaba que el independentista Partido Nacional Escocés obtendría sólo 10 escaños, su peor resultado desde 2010, tras un periodo de agitación que ha visto dimitir a dos líderes en poco más de un año.
"Si este sondeo a boca de urna es correcto, entonces se trata de una derrota histórica para el Partido Conservador", dijo a Reuters Keiran Pedley, director de investigación de Ipsos, que realizó el sondeo a pie de urna.
"Parecía que los conservadores iban a estar 10 años en el poder y todo se ha venido abajo".
SUNAK ES EL "CHIVO EXPIATORIO"
Sunak sorprendió a Westminster y a muchos en su propio partido al convocar las elecciones antes de lo necesario en mayo, con los conservadores por detrás de los laboristas en unos 20 puntos en los sondeos de opinión.
Esperaba que la diferencia se redujera, como ha ocurrido tradicionalmente en las elecciones británicas, pero en lugar de eso tuvo una campaña bastante desastrosa.
Si el sondeo a boca de urna resulta acertado, representa un giro increíble para Starmer y los laboristas, que, según críticos y partidarios, se enfrentaban a una crisis existencial hace sólo tres años, cuando parecían haber perdido el rumbo tras la derrota de 2019.
Pero una serie de escándalos -sobre todo las revelaciones de fiestas en Downing Street durante los confinamientos por el COVID- socavaron al entonces primer ministro Boris Johnson y su ventaja en las encuestas se evaporó.
El desastroso mandato de seis semanas de Liz Truss, que siguió a la salida forzada de Johnson a finales de 2022, consolidó el declive, y Sunak fue incapaz de hacer mella en la ahora dominante ventaja de los laboristas en las encuestas.
"Merecíamos perder. El Partido Conservador parece agotado y sin ideas", dijo a Reuters Ed Costello, presidente de la organización Grassroots Conservatives, que representa a los miembros de base.
"Pero no todo es culpa de Rishi Sunak. Son Boris Johnson y Liz Truss los que han llevado al partido al desastre. Rishi Sunak es sólo el chivo expiatorio". (Reporte adicional de William James, Kylie MacLellan, Sachin Ravikumar, Paul Sandle y Muvija M; Escrito por Michael Holden y Kate Holton; Editado en Español por Ricardo Figueroa)