Meloni afirma que tiene "el Gobierno más fortalecido de Europa" y reivindica el peso "fundamental" de Italia

La primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, ha afirmado este lunes que su país está llamado a tener un papel "fundamental" en el futuro inmediato de la Unión Europea, entre otras cosas porque considera que lidera "el Gobierno más fortalecido de Europa" tras los comicios del domingo.

Hermanos de Italia obtuvo más del 28 por ciento de los votos en estas elecciones, lo que permitirá al partido de Meloni tener 24 eurodiputados en la legislatura en ciernes. Será la formación con mayor representación dentro del grupo Conservadores y Reformistas (ECR) y la tercera en la Eurocámara.

La primera ministra italiana, sin embargo, ha evitado en una entrevista con la emisora RTL avanzar cuál será su posición en relación a una segunda etapa de la 'popular' Ursula Von der Leyen al frente de la Comisión Europea, a la espera de terminar de recopilar datos y establecer "posibles respuestas".

No obstante, ha recalcado el crecimiento de algunos partidos como el suyo que no forman parte de la teórica "mayoría" que tradicionalmente han representado populares, socialdemócratas y liberales, al tiempo que ha llamado a avanzar hacia políticas "más pragmáticas" y "menos ideológicas" en Bruselas.

Posibles alianzas

En relación a las potenciales alianzas en el ámbito de la ultraderecha, Meloni tampoco ha dado pistas, más allá de señalar que Agrupación Nacional obtuvo "un resultado muy importante" en Francia, que incluso ha llevado al presidente Emmanuel Macron a convocar elecciones legislativas anticipadas.

"El camino que está siguiendo Marine Le Pen es sin duda un camino muy interesante", ha dicho Meloni, que debe ahora decidir cómo hacer valer su peso en la nueva configuración del Parlamento Europeo en donde la extrema derecha ha mejorado sus resultados con respecto a la legislatura que termina pero se reparte en al menos dos grupos. Agrupación Nacional, que tendrá 30 eurodiputados, se integra en Identidad y Democracia (ID).

Parece poco probable que puedan unir fuerzas bajo un único "supergrupo", una opción que los partidos ultraconservadores y de extrema derecha ya han explorado sin éxito en legislaturas pasadas.

Además, quedan incógnitas por resolver en las próximas semanas de negociación, por ejemplo si el Fidesz del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, encontrará encaje en alguno de los dos grupos, aunque su proximidad al Kremlin incomode a Meloni en su estrategia.