5 millenials explican por qué desafían las estructuras laborales

Les interesa planificar, pero siempre enfrentándose a obstáculos que les permitan crecer, profesional e individualmente. Se plantean retos y se desafían a sí mismos para vencerlos. Quieren viajar por el mundo, encontrar una motivación. No les gusta atarse a horarios, a formatos impuestos, y mucho menos aceptan que les digan cómo tienen que organizarse o de qué manera deben vestirse. Se trata de abrirle las puertas a la rebeldía y derribar estructuras que, aseguran, ya perdieron sentido. Son los líderes del futuro y, de a poco, están siendo más valorados y escuchados. El talento de esta nueva generación se hace notar fácilmente y las empresas ya están reconociendo su potencial. Porque el poder, hoy, es millennial.

"Los millennials le damos mucho valor a que nos escuchen y a impactar. Necesitamos sentir pasión por lo que hacemos. Buscamos libertad a través del trabajo, de la realización. Somos multitasking: queremos saber y hacer muchas cosas. Nuestra generación es mentalmente flexible, un día podemos estar muy seguros de lo que pensamos y al otro día cambiar. Flexibilidad en todos los ámbitos de la vida y en las parejas también: que haya apertura y libertad es fundamental. Estamos atravesando un momento millennial que transciende todo e impacta en todas las capas de la sociedad. Antes le teníamos miedo al riesgo; hoy lo valoramos. Hay que arriesgar, animarse, estar en constante búsqueda. Lo más importante y desafiante es eso: vivir el cambio".

"Tratamos de hacer algo que se vea reflejado en la sociedad, que aporte valor. Nos ponemos desafíos constantemente, ahí aparece la motivación. Por eso creemos que cada trabajo tiene un ciclo: cuando cumplís los objetivos que te habías planteado, es momento de buscar otra cosa. La adrenalina de ese reto nuevo nos impulsa. Creo que somos rebeldes con causa. A mí no me gusta hacer las cosas como me las dicen, estoy todo el tiempo tratando de mejorar, de optimizar, de cuestionar y romper las estructuras que en las empresas están muy dadas. Hay que soltar lo dado y darle espacio a la mirada millennial".

"El día que cumplí 23 años estaba en un avión, viajando a la India, rumbo hacia mi nuevo trabajo como diseñadora para una fábrica textil. Eso es ser millennial: aventurarse, buscar nuevas cosas, explorar, jugársela. Viajar te enriquece un montón, por eso es importante que las empresas nos puedan dar la libertad de ir a conocer otros lugares para aprender y progresar. Somos ansiosos, nos gustan los retos y tenemos mucha conciencia social. Queremos proponer proyectos propios y necesitamos salir de la comodidad, de la rutina. Es clave dejar a un costado la estructura y animarse a modificar todo".

"Siento que está distorsionado el concepto millennial. Yo me considero una persona que hace muchas cosas a la vez, que no quiere un trabajo siempre, me gusta innovar, desafiarme, buscar nuevas cosas. Siempre trato de recibir información para conocerte más profundamente, descubrirte. Estamos en una época y con una edad en la que tenés que agarrar todo lo que puedas para después saber bien qué querés hacer. Tenemos una mentalidad más abierta y eso produce una marea de cambios. Hoy en día hay que pensar distinto, tirar más ideas, renovar. En mi trabajo, por ejemplo, aporto el aire más juvenil".

"Queremos hacer un camino propio. Aportamos mucha rebeldía, sensibilidad e innovación: ganas de hacer, de buscar todo el tiempo soluciones, de estar cambiado, de no tener miedo a equivocarnos, de pedir ayuda. Somos mucho más permeables a adaptarnos e ir cambiando según las circunstancias. Queremos hacer algo que transforme, con la conciencia puesta en el vínculo social. Sé que no voy a salvar el mundo, pero algo voy a cambiar".