“Estamos solitos, vengan a charlar", el tierno pedido de una pareja de ancianos a la policía de Posadas
![Después de tantos días de encierro, Neli y Senén, ambos de 84 años, llamaron a la policía para que vayan a charlar a su casa](https://www.lanacion.com.ar/resizer/v2/-LQKGFCDKKRGXRGS7IAQXILV4RA.jpg?auth=783fc30c070217b8c74cd4b1e4c23d2e0fba64e8f7b0eab2842d6a50dde7e241&width=420&height=280&quality=70&smart=true)
Durante la cuarentena por el coronavirus, algunas personas buscan maneras de aprovechar el encierro para afianzar vínculos con los que los rodean, otros la transitan en soledad sin inconvenientes y otro tanto, busca la manera de menguar el aislamiento y la falta de contacto social. En Posadas, por ejemplo, una pareja de ancianos llamó a la policía para invitarlos a su casa "charlar y tomar unos mates".
Ellos son Nelly y Senén, ambos de 84 años, que ante la necesidad de poder compartir una charla y una mateada se les ocurrió llamar a una patrulla policial de la zona para que los acompañara luego de pasar toda la pandemia sin contacto alguno.
El teléfono sonó el sábado y la policía que atendió no podía creer lo que escuchaba. Al principio temió que se tratara de una broma de mal gusto. "Somos mayores, estamos solitos y queríamos invitarlos a tomar mate y charlar a nuestra casa", fue el tierno pedido del matrimonio que se oyó del otro lado del teléfono.
Frente al llamado, los efectivos de la Comisaría 7ª, se sorprendieron cuando recibieron la invitación y fueron hasta un domicilio del barrio del oeste de la capital de Misiones. En pleno aislamiento social, preventivo y obligatorio, Nelly y Senén confesaron que la visita fue muy importante porque no tienen familiares cercanos.
El grupo de policías que se dirigió a la casa improvisó una ronda de charlas y de mates. Eso sí, cada uno con el suyo y respetando todas las medidas de seguridad e higiene. No faltaron los clásicos bizcochitos dulces y chipás.
La reunión comenzó al mediodía y allí hablaron de diversos temas. La pareja de "abuelitos", como los llaman los oficiales que los visitaron, les contó que no tenían a nadie de su círculo íntimo para compartir un momento. "Nos sentimos solos, más aún en la cuarentena", reconocieron Nelly y Senén.
El gesto los emocionó a los policías, que además consultaron con la Defensoría de turno para que de ahora en adelante la pareja tenga asistencia de forma permanente.
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