Los inventos de Leonardo Da Vinci: el genio que anticipó el futuro
LA NACION

Pintor, filósofo, ingeniero, músico, paleontólogo, artista, científico, botánico, escritor, escultor, poeta, urbanista, ingeniero e inventor; todo eso era Leonardo Da Vinci, fallecido el 2 de mayo de 1519, en Francia.
Además de dejarle a la humanidad pinturas tan importantes como La Gioconda o Mona Lisa y La Última Cena, Leonardo se adelantó a su tiempo y gracias a su increíble imaginación creó inventos que mucho tiempo después formaron parte de nuestro día a día.
Los 5 mejores inventos de Da Vinci
- El equipo de buceo: lo diseñó cuando viajaba a Venecia. Para prevenir los ataques enemigos desde al agua, Da Vinci diseñó una máscara con tubos de caña que partían desde la nariz hacia una campaña de corcho que flotaba en la superficie.

- El reloj: ya estaba inventado, pero Da Vinci logró perfeccionarlo. Con un mecanismo compuesto de pesos, artes y arneses pudo darle mayor precisión e incorporó un dial con las fases lunares.

- El helicóptero: cuatro siglos antes de la construcción del primer helicóptero, Da Vinci ya había pensado en las hélices como aparatos que permiten volar.

- El paracaídas: fue creado en 1783 por Sebastien Lenormand. Sin embargo, en las notas de Da Vinci aparecen las mediciones exactas de una "tienda hecha de lino" que permitiría sujetar a una persona que se arrojara de gran altura sin sufrir daños.

- La máquina voladora: Da Vinci creía firmemente en que un día el hombre volaría por los cielos como lo hacen los pájaros, por este motivo inventó una máquina voladora, conocida como "ornitóptero", inspirada en el vuelo de las aves y murciélagos.

LA NACION
Temas
Otras noticias de Efemérides
Más leídas de Sociedad
Tiene 30 años. Viajó a Playa del Carmen en busca de oportunidades, se descompuso y está internada en grave estado
Ciudadanía italiana. El consulado anunció cambios para poner un freno a los gestores
Actividad eléctrica y granizo. Tormentas para la Ciudad de Buenos Aires y alerta meteorológica en 11 provincias
Confitería Neptuno. La joya porteña abandonada hace 50 años que aún conserva un tesoro artístico invaluable y sueña con renacer