Para Oyarbide, el apagón no fue culpa de un árbol

El apagón de hace dos semanas que provocó un caos en el centro porteño y dejó a 850.000 usuarios de la Capital y el conurbano sin energía eléctrica no fue producto de la caída accidental de un árbol , sino que probablemente haya sido producto de un sabotaje u otro tipo de accidente, según los primeros datos en poder de la Justicia.

Así lo hicieron saber ayer fuentes del juzgado de Norberto Oyarbide en sintonía con la idea del Gobierno, que, lejos de hablar de una falla técnica producto de la falta de inversión, presentó una denuncia penal ante la sospecha de que alguien "bajó la palanca", como graficó el ministro de Planificación, Julio De Vido.

Esa causa quedó radicada en el juzgado de Oyarbide, que le tomó declaración testimonial al l íder del sindicato de Luz y Fuerza, Oscar Lescano. El gremialista dijo en los medios y bajo juramento en el expediente que el corte se debió a que unos árboles que estaban cerca de una línea de alta tensión no fueron podados y cortaron los cables, lo que sacó de servicio a parte de la red de distribución eléctrica en la ciudad de Buenos Aires.

El juez espera los resultados de un trabajo técnico que está realizando la Universidad de La Plata en el lugar del corte de cables, un descampado entre Hudson y Quilmes, al sudeste del conurbano, por encargo del Ente Nacional Regulador de la Energía (ENRE).

La propia empresa Edesur adjudicó la falla a la salida de servicio en una línea de 1200 kw entre Hudson y la Central Costanera.

En su momento, De Vido dijo que debía excluirse la hipótesis de un pico de consumo y que se hallara en mal estado la línea de alta tensión, pues explicó que había sido recientemente sometida a una supervisión de rutina.

Oyarbide pidió diversos peritajes y opiniones técnicas, que pese a no estar concluidos lo habrían llevado a descartar la hipótesis de un accidente por falta de poda, lo que deja abierta la hipótesis del sabotaje o de una falla técnica.