Cómo convivir con la presión de ser el gran candidato del Dakar

El próximo Dakar está a la vuelta de la esquina. El sábado 3 de enero comenzará con la ceremonia de largada en Plaza de Mayo. Y si bien la expectativa que despierta cada una de las disciplinas es por demás atractiva, ya que el interrogante por saber quiénes serán los dominadores en cada una de las categorías aumenta, en motociclismo hay una figura excluyente: el español Marc Coma, vencedor en cuatro ocasiones, se presenta como el gran candidato a llevarse el triunfo, de la mano del equipo KTM.

No sólo por sus cualidades técnicas y por el potencial de la marca se presenta el español bien arriba en el favoritismo previo a la gran competencia. Coma, además, protagonizó históricos duelos con el francés Cyril Despres, que ya no competirá en motos, ya que se pasó a los autos y debutará en esa disciplina con el team Peugeot. "Será interesante ver cómo se desempeña Cyril en autos. Quizá en un futuro yo pueda dar el mismo paso. No lo descarto", admitió.

El piloto español compartió sus vivencias con la prensa argentina, a través de una videoconferencia realizada por Karcher Argentina. A los 38 años, el español, que este año también conquistó el Campeonato Mundial de Rally Raid en motociclismo, ganó el Dakar en 2006, 2009, 2011 y 2014.

"Tengo grandes expectativas para el próximo Dakar. Estoy en un equipo fuerte, con ambiciones, y la idea es mantener un plan de carrera. Por supuesto que en un raid tan extenso, es muy difícil tener todo bajo control, pero lucharemos por mantenernos competitivos", comentó Coma.

Sería fantástico ganar por quinta vez. Llegamos con la confianza que otorga una muy buena temporada

-¿Cómo se prepara un Dakar, avalado por la enorme experiencia en este tipo de competencias?

-Con suma tranquilidad. Sería fantástico ganar por quinta vez. Llegamos con la confianza que otorga una muy buena temporada. Hasta ahora cumplimos con todos los plazos previstos en la antesala de la competencia. Es muy importante ahora estar tranquilos y esperar la fecha con expectativa. Cuanto más descansado llegue, mejor será para tener un buen arranque.

-El panorama ahora cambió. Tu gran rival de los últimos años, Despres, se pasó a los autos y ya se advierte un cambio generacional. ¿En qué te modifica esta nueva situación?

-La foto ha cambiado. Al final no será más fácil. Al contrario. El nivel sube año tras año. Es cierto que ya no está Cyril. Pero también es cierto que el nivel de los competidores sube permanentemente y será un Dakar complejo.

-¿Qué diferencias hay con la KTM de 2014?

-Trabajamos muy bien. Hay un gran esfuerzo desde el año pasado. Estéticamente no hay grandes diferencias, aunque la moto ganó en potencia y en algunas prestaciones que aumentan en la confiabilidad.

-El próximo Dakar tendrá dos etapas maratón, como en África, además de varios tramos con mucha altitud. ¿Cómo afectarán estas características?

-Hay que tener todo bajo control. Pero en realidad es imposible (risas). No existe ello en un Dakar. Hay que intentar hacer las cosas bien desde el comienzo. Estar atentos a las reacciones cuando comiencen los problemas.

-¿Dos etapas maratón potencia la experiencia de un piloto?

-Intentaremos que la experiencia nos ayude. Ya que la tenemos, tendremos que aprovecharlas. Por eso confío no sólo en mi experiencia, sino en la del equipo, que está realmente muy fuerte.

La presión me la pongo yo mismo. Siempre fui muy ambicioso. Desde mis comienzos

-Sin Despres, ¿quién puede mantener un ritmo competitivo?

-Joan Barreda y Sam Sunderland son dos ganadores potenciales, porque evidenciaron un ascenso notable en sus actuaciones. Hay otros pilotos también muy competitivos.

-¿Sentís que hay mucha presión encima de tu nombre?

-La presión me la pongo yo mismo. Siempre fui muy ambicioso. Desde mis comienzos.

-¿Qué significa que el Dakar vuelva como en 2009 con el comienzo y la llegada en Buenos Aires?

-Es un motivo extra para tomar mayor entusiasmo con la carrera. Buenos Aires siempre nos garantizó ceremonias de partida y de llegada multitudinarias. Recuerdo que fue una gratísima sorpresa cómo la gente acompañó la carrera, por lo que descarto que esta vez será igual. Además, es una ciudad bellísima, que invita a descubrirla y conocerla.