Río 2016: Alberto Palmetta e Ignacio Perrín perdieron sin atenuantes y se despidieron

RÍO DE JANEIRO.- El bonaerense Alberto Palmetta perdió hoy en su debut olímpico con el mongol Tuvshinbat Byamba por la categoría Welter (69 kilogramos) y quedó eliminado de los Juegos de Río de Janeiro 2016.

En el Pabellón 6 de Riocentro, el pugilista de Beccar de 26 años, bronce en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015, cayó por decisión unánime en las tarjetas por 30-27, 30-27 y 29-28. "Me traicionó el exceso de confianza. Sentía que los golpes de él no me hacían nada, pero para el jurado influyeron un montón. Era para cualquiera de los dos, me parece que la merecía. Fue una pelea muy pareja. En los dos primeros rounds me sentía muy bien y fui a cruzarme. Pero es cierto que recién en el final pude desplegar mi plan. Me acordé un poco tarde quizás", evaluó Palmetta después del combate.

El boxeo argentino, que el sábado sufrió la eliminación de Leandro Blanc ante el mexicano Joselito Velázquez en la categoría minimosca, tampoco tuvo revancha con Ignacio Perrín, en la división de 60 kilos, que también fue derrotado hoy 3-0 en fallo unánime, en tres rounds, por el tailandés Amnat Ruenroeng, en un combate por 16avos de final de la categoría.

El ligero bonaerense perdió en forma legítima y justa (30-27 dos jueces y 29-28 el restante) y, por lo tanto, quedó eliminado en la primera instancia del los Juegos, en un cruce efectuado en el Pabellón 6 del Río Centro.

Perrín, de 31 años, no pudo superar al experimentado boxeador de Tailandia) que es profesional y además fue un sólido campeón mundial de los moscas de la Federación Internacional de Boxeo (FIB), título que resignó el 25 de mayo pasado en China ante el filipino John Casimero quien lo noqueó en cuatro rounds.

Ruenroeng (36) con muy poco se quedó con la victoria en una pelea deslucida. En forma continua ambos púgiles amarraron y en varias oportunidades al quedar enredados fueron a la lona dándole bastante trabajo al árbitro ruso Sergei Morotov.

El argentino no pudo contrarrestar el boxeo heterodoxo y mañero del tailandés que se mostró reacio para librar una pelea franca y de "contra" sumó los puntos suficientes -sin sobrarle nada- para quedarse con la victoria.

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