Se clasificaron tres boxeadores a Río 2016, una marca que no se conseguía desde Sydney 2000

La gloria anda por el mundo sin reloj ni almanaque. Generalmente está viajando y su destino es incierto. Pero siempre sabe indemnizar al que se esfuerza por encontrarla. Ayer, una parte pequeña de ese encanto viajero y nómade se hizo presente en el salón Frers del predio Ferial de La Rural de Buenos Aires, donde se disputa el Preolímpico americano de boxeo, y premió con pasajes directo a los Juegos Olímpicos de Río 2016 a tres boxeadores argentinos: Yamil Peralta, Alberto Melián y Fernando Martínez. Ya son 179 los argentinos clasificados a Río 2016.

Entre los logros del pasado, los problemas de presente y las dudas del futuro, el vapuleado boxeo argentino, fiel a su tradición, volverá a tener representantes en la máxima cita deportiva, donde acumula 24 medallas (7 de oro, 7 de plata y 10 de bronce). El bonaerense Peralta, de 24 años, logró un importante triunfo ante el norteamericano Cam Awesome y participará nuevamente en un Juego Olímpico (estuvo en Londres 2012). Haciendo gala de su pegada efectiva, logró sacar adelante un combate muy complicado ante un rival 10 centímetros más alto y con mayor alcance de brazos. "La alegría que tengo es enorme, hace cuatro años que pienso y me preparo para los Juegos Olímpicos. Esto es una revancha para mí, porque en Río voy a buscar la medalla que me robaron en Londres 2012", comentó Yamil, visiblemente emocionado, ni bien bajó del ring. Mañana, en la final de la categoría 91 kilos, combatirá ante el cubano Erislandy Savón, sobrino de Félix, ex campeón mundial amateur y múltiple medallista olímpico.

En tanto, el cordobés Alberto Melián, unas de las mayores promesas del boxeo nacional en la categoría de 56 kilos, derrotó por puntos, en fallo unánime, al puertorriqueño Carlos Caraballo Rodríguez. El impacto, quien el sábado pasado había dado la sorpresa de derrotar al cubano Robeisy Ramírez, campeón olímpico en Londres 2012, mañana se medirá ante el yanqui Shakur Stevenson. "Esto recién empieza, el objetivo es la gloria en los Juegos Olímpicos", exclamó Melián, quien también asistirá a la cita por segunda vez, ya que estuvo en Londres 2012.

Otro fruto de este árbol floreciente que es el boxeo argentino, es el porteño Fernando Martínez, quien en la categoría de 52 kilos derrotó por puntos al colombiano Ceiber Ávila y también obtuvo ticket para Río. Su clasificación fue sorpresiva, ya que en los últimos certámenes de AIBA no habían sido sus mejores. "No quería hacerme profesional sin quedarme con la oportunidad de competir en un Juego Olímpico. Hoy cumplí mi sueño y el de mi viejo, que lamentablemente ya no está", comentó Fernando, antes de irrumpir en llanto. Desde Sydney 2000 que no se clasificaban tres púgiles.

En el medio de la alegría por la clasificación a Rio 2016 de Peralta, Martínez y Melián, quedaron truncos los sueños de Leandro Blanc en 49 kilos (perdió ante Nico Hernández de Estados Unidos), Kevín Espíndola en la categoría +91 (perdió ante triniteño Paul Nigel), la cordobesa Dayana Sanchez en 60 kilos (perdió ante la mexicana Victoria Torres), Fernando Perrin en 60 kilos (lo derrotó el representante de Honduras Teofimo López Rivera) y Alberto Palmetta en la categoría de 69 kilos (perdió con el cubano Roniel Iglesias). De todas maneras tanto Perrín como Palmetta, hoy tendrá otra chance para acceder a los Juegos Olímpicos, ya que sus categorías otorgan tres plazas.

El técnico de los argentinos, el uruguayo Julio García es conscientes que la competencia en Rio será mucho más dura: "Hoy se puede decir que cumplimos gran parte del objetivo. Desde Sidney 2000 que no lográbamos clasificar más de dos boxeadores. Eso deja en evidencia que vamos creciendo, aunque todavía nos falta mucho para estar a la altura de las potencias", analizó.

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