El básquet argentino, en busca de otra generación

Justo cuando la Liga Nacional de básquetbol se vuelve treintañera, más se fija en los veinteañeros, e incluso más jóvenes. La 31ª temporada de la creación encabezada por León Najnudel será otro mojón en la zigzagueante búsqueda de su madurez, con cambios que tratarán de hacerla más atractiva en el corto plazo, pero a la vez pensando en el mediano, potenciando, quizás más por necesidad que por convicción, a los jugadores más inexpertos.

La Generación Dorada va apagándose de a poco y, con el reciente golpe de la temprana eliminación en el Mundial de España (a pesar de las importantes ausencias), se vuelve muy necesario foguear a los que pintan bien, a los que en estos años deben tomar la posta de los grandes de la historia del básquetbol argentino. Además, la nueva conducción de la Asociación de Clubes (AdC), organizadora del certamen, ya lo tiene por objetivo institucional. "La flamante gestión apunta a revalorizar el producto LNB, con especial énfasis en el desarrollo de las nuevas estrellas. Desde las áreas de marketing y comunicación se empezará a desarrollar un plan estratégico 2014-2018 que tendrá a los jóvenes talentos como principales protagonistas en las próximas acciones", manifestó la entidad a la nacion.

La Liga 2014/15, entonces, irá en esa búsqueda, forzada también por la salida de algunas figuras, como el vigente Walter Herrmann , que dejó Atenas para probarse a los 35 años en el brasileño Flamengo, campeón de la Liga de las Américas, y el creciente Facundo Campazzo , que por fin dejó el ámbito local para medirse, a los 23 años, en la alta exigencia europea con la camiseta de Real Madrid, con la que debutó ayer. De los nombres rutilantes quedan tres componentes de la Generación Dorada, ya en la parte final de sus carreras. Leonardo Gutiérrez (36 años) seguirá liderando a Peñarol en la era del club marplatense, Gabriel Fernández (37) lo acompañará en el campeón y Rubén Wolkowyski , que se había retirado tras un par de temporadas en el Torneo Nacional de Ascenso (TNA), vuelve a los 41 años para vestir nuevamente los colores de Quilmes , que pasado mañana inaugurará el certamen en el clásico con Peñarol. Además, está intacto Paolo Quinteros (35), siempre sobresaliente en Regatas Corrientes .

Pero ya las miradas se ocuparán más de los que piden pista. En primer lugar, de los más chicos que actuaron en España 2014: Marcos Delía , Matías Bortolin y Tayavek Gallizzi . Delía (22 años) cambió Boca Juniors por Obras Sanitarias , donde seguirá a las órdenes de Julio César Lamas , que acaba de dejar de dirigir al seleccionado nacional. El entrenador confía en el muchacho de 9 de Julio y le da más participación que la que el pivote tenía en Boca, al punto de que en Obras debería ser titular. Otro que ganaría minutos es el ala-pivote cordobés Bortolin (21), que va a un equipo de su provincia, Atenas, procedente del subcampeón, Regatas, pero en su puesto tendrá más competencia: Gabriel Mikulas, Diego Lo Grippo y Damián Filloy; quizás se le haga un lugar como pivote. Lo inverso puede pasar con Gallizzi (21), que tras sorprender con su convocatoria para el Mundial crecerá en protagonismo en Quilmes. El ágil pivote tendrá en su puesto favorito a Wolkowyski y a Diego Romero, por lo que quizás termine actuando como ala-pivote, una función que no está bien cubierta en el plantel.

Claro que hay mucho más detrás de los tres mundialistas. Un primer vistazo obvio se posa en Franco Giorgetti (22), el chaqueño muy dotado de condiciones que no tuvo continuidad en Peñarol por sus lesiones de hombros -operaciones incluidas- y por la calidad de los titulares en el milrayitas. De estar sano y con el movimiento de piezas que hubo en el plantel, al alto alero (2,02 metros) aumentará su presencia. Ya habría que prestar atención a Nicolás Brussino , puro talento con sus 2 metros de estatura en la posición de 2 o la de 3. Viene de ser subcampeón sudamericano por la Argentina en Isla Margarita, Venezuela, y aunque no tuvo mucha intervención en la campaña 2013/14 de Regatas, parece que, a los 21 años, puede ser el primer relevo de Quinteros (escolta) y del recién llegado Pablo Espinoza (alero). Más precoz aparece Gabriel Deck, que a los 19 años ya está en esa situación de ser primer suplente, pero como 3 o 4, en Quimsa. El santiagueño viene de ser campeón mundial de 3x3, una modalidad de juego reducido que sería lo que un fútbol sala al fútbol. Pero no significa mucho eso para el básquetbol regular. "Son dos juegos diferentes y puede haber jugadores que se destaquen en uno y no en el otro, y viceversa", advirtió a la nacion Enrique Tolcachier, ex seleccionador nacional juvenil y hoy director deportivo de la Confederación Argentina de Básquetbol (CABB) .

Hasta ese punto, los más conocidos. Hay muchos otros que actuaron en seleccionados juveniles con buena proyección pero poca difusión. Luca Vildoza (19) ya tiene ganado un lugar como base en Quilmes. En su archirrival debutará en la Liga Luciano Massarelli (21), también conductor, pero que viene de foguearse en el TNA, en el que fue el jugador más valioso. Franco Barroso (20), de La Unión, entusiasma con sus 2,07 metros, una estatura que a la Argentina siempre le hace falta. También llama la atención Juan Pablo Vaulet, con sus 18 años y 2,02 metros al servicio de Bahía Estudiantes . "Es uno de los proyectos importantes de nuestro básquet. Jugó un mundial Sub 17 y ahora vuelve tras un año sin jugar por una fractura. Es apasionado y de gran proyección", describió Tolca.

Hay más. Carlos Buemo (18), alero de Sionista , ha mostrado su capacidad atlética en diversas competencias del último Juego de las Estrellas. Alejandro Zurbriggen (19), campeón mundial de 3x3 junto a Deck, puede abrirse espacio en Regatas. Y Máximo Fjellerup, con apenas 17 años, asombra por su habilidad en la base de Bahía Estudiantes. Otros chicos llamados a trascender son Emiliano Basabe (22, Argentino -Junín- ), José Vildoza (18, Libertad ), Álvaro Merlo (19, Atenas) y Lucio Delfino (17, Olímpico ), hermano de Carlos.

Obviamente, toda proyección es incierta. "El talento es natural y uno se da cuenta de que el chico tiene aptitudes diferentes a sus 13 o 14 años. Pero no se puede avizorar que ese talento se asegurará en resultados futuros. Depende también de la mentalidad, la contracción al trabajo, los hábitos personales, el entorno. Ya a los 18 o 19 salta a la vista si el jugador será bueno", apuntó el experto Tolcachier. Pues, más que nunca, la Liga quiere este año ser ese entorno ideal para forjar basquetbolistas. En provecho propio, y también del seleccionado.

Dos conferencias y todos a los playoffs

El formato de la Liga será similar al del año pasado, pero con cambios para la etapa de playoffs. Los 18 equipos se dividirán en dos Conferencias (Norte y Sur). Los 9 equipos de cada zona jugarán todos contra todos ida y vuelta para un total de 18 partidos.

En la 2a etapa, jugarán los 18 equipos todos contra todos (partido y revancha), sumando otros 34 encuentros. Todos los puntos cuentan pero las posiciones seguirán separadas entre conferencias.

Al finalizar la etapa regular, todos los equipos irán a los playoffs. Primero habrá un repechaje para definir el clasificado entre el 8° y el 9° de cada zona. Luego jugarán dentro de cada Conferencia 1° vs. 8°, 2° vs. 7°, 3° vs. 6° y 4° vs. 5°. Los campeones del Norte y el Sur jugarán la final de la Liga Nacional.

El ya tradicional Súper 8 se jugará entre el 10 y el 20 de diciembre, con los tres primeros de cada conferencia, el mejor 4° y un equipo invitado por la mesa ejecutiva de la AdC.clásico marplatense

Pasado mañana, Peñarol-Quilmes abrirá la Liga, a las 21 en el Polideportivo. El 2° clásico (1/10) será en ese estadio por pedido de Aprevide, y no en Once Unidos, como querían los dirigentes quilmeños