A Barracas Central le funcionó el laboratorio para ganar y Colón lamentó lo que desperdició Wanchope Ábila

Sergio Rondina festejó el gol con más euforia y desenfreno que sus jugadores. Salió corriendo hacia un costado, desgañitado, con los brazos en alto. Tenía más de un motivo. El primero, que el tanto de Carlos Arce, a los 36 minutos del segundo tiempo, le daba a Barracas Central el triunfo por 2-1 sobre Colón, por la octava fecha de la Zona A de la Copa de la Liga. Y la otra razón del éxtasis del director técnico radicaba en que el gol había sido producto de su amplio repertorio de jugadas preparadas con la pelota detenida. En este rubro, el “Huevo” Rondina está considerado como uno de los entrenadores que ensayan más variantes para sorprender al rival.

En esta ocasión, Rodrigo Insua ejecutó en tres cuartos de campo adversario un tiro libre rasante, hacia la entrada del área, hasta donde se retrasó Nicolás Capraro para hacer un toque alto y combado que Arce conectó de aire para vencer al arquero Ignacio Chicco. El remate del capitán de Barracas -un histórico del club, partícipe en dos ascensos- no fue desde una posición cómoda, inclinado hacia atrás, pero resultó eficaz. La defensa de Colón nunca llegó a intervenir.

El compacto de Barracas Central 2 - Colón 1

“Tenemos varias jugadas preparadas, después decidimos nosotros en la cancha cuál intentamos. Ya la habíamos hecho contra Racing, por suerte hoy salió lo que practicamos en la semana”, expresó Insua.

Barracas revirtió una desventaja, volvió a la victoria tras dos partidos y tomó aire en la Tabla Anual que definirá uno de los dos descensos. Colón, que está comprometido para mantener la categoría, ganaba desde los 14 de la primera etapa, con un gol de Tomás Galván.

Rondina modificó el esquema para el segundo período, con el ingreso de Capraro pasó a defender con tres zagueros y adelantó a las laterales como carrileros. Estando 1-0, Colón tuvo la posibilidad de sacar una ventaja quizá decisiva. Tras un despeje, Ramón Ábila arrancó en campo propio en una corrida de más de 50 metros, sin rivales en el camino. Más potente que veloz, al entrar al área el delantero había sido alcanzado por un defensor, al que gambeteó, mientras a un costado su compañero Eric Meza esperaba la asistencia, pero Wanchope quiso dejar atrás al delantero Andrés Desábato, que se quedó con la pelota al arrojarse a los pies. En el banco de suplentes, Néstor Gorosito no ocultó una mueca de desaprobación por lo que había desperdiciado Ábila, reemplazado minutos más tarde por Santiago Pierotti.

Cuando restan seis fechas, Colón estaría disputando con Huracán y Gimnasia un triangular para determinar el descenso por la Tabla Anual. Gorosito no asistió a la conferencia de prensa, en su lugar lo hizo el zaguero central Paolo Goltz: “Al técnico lo bancamos, el grupo está muy bien, unido”. Inevitable fue una referencia de Goltz a la ocasión desaprovechada por Ábila: “No hablé con él, tuvo una muy clara y debe estar con mucha bronca. Es alguien que en los momentos que tiene que aparecer, aparece, no hay que quedarse solamente con lo de hoy”. En la próxima fecha, el 19 de octubre, Colón recibirá a River.

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