Boca: Marcelo Weigandt aceptó la recomendación del médico del equipo y será operado

La derrota de Boca ante Vélez por 2-0 el último domingo, por el Torneo 2021, no sólo dejó la imagen negativa del resultado para el equipo de Sebastián Battaglia. El otro momento amargo para el Xeneize fue la desafortunada lesión que sufrió Marcelo Weigandt, que significó la salida del campo de juego del defensor durante la primera etapa.

En las horas posteriores al choque contra el Fortín, el lateral expresó que no tenía pensado someterse a una intervención por la luxación de su hombro derecho. Los tiempos entre una recuperación y una cirugía no son los mismos, y cualquier futbolista desea la inmediatez. En este sentido, quien habló fue Rubén Argemi, el médico del plantel de Boca, y fue determinante con respecto a los pasos a seguir respecto a la rehabilitación del futbolista: “Se tiene que operar, porque cada vez que haga una rotación, aunque sea para prender la luz en la cama, se le va a salir el hombro”. Finalmente, en las últimas horas del martes, el defensor aceptó el consejo y en breve será sometido a una operación.

Ese convencimiento también predominó desde el Consejo de Fútbol, liderado por Juan Román Riquelme, con la certeza de que ahora o en cualquier otro momento todo iba a derivar en una cirugía inevitable, debido a que los doctores advirtieron que lo más factible es que ese hombro se salga de lugar muy fácil durante cualquier partido (o entrenamiento) que tenga, tras esta recuperación de al menos un mes: “Lo mismo les pasó al Pato (Abbondanzieri) y a Balerdi (Leonardo, ex futbolista del club y actualmente en Marsella). ¿Cómo terminaron? Operándose. Esto es igual”, le comentaron a LA NACION desde las cercanías del vicepresidente.

En la entrevista que el profesional le brindó a ESPN, expresó: “Cada luxación va rompiendo los huesos. Por su bien, por su salud, le decimos que se opere lo antes posible. Es lo mejor para su carrera deportiva. Weigandt tiene una tolerancia al dolor inimaginable, pero es un riesgo innecesario porque el hombro se le salió de la nada misma. Cada vez que haga una rotación, aunque sea para prender la luz en la cama, se le va a salir el hombro”.

Algo que hasta aquí no había trascendido es que el defensor de 21 años había sufrido episodios similares en la quinta división y en la reserva del club: “Se le salió de forma fácil y le entró fácil, algo que nos llamó la atención. Cuando lo estudiamos, encontramos esas dos lesiones de chico. Tiene roto el rodete y la traba del hueso. El hombro del Chelo es luxable y de indicación quirúrgica, eso está fuera de discusión médica. Lo único que se puede discutir es si se opera ahora o arriesga a seguir jugando y luxarse hasta que se opere”.

Por otra parte, el médico de Boca Rubén Argemi aseguró que la intención de la familia es dejar la decisión en manos de los facultativos. Si todos consideran que lo mejor para el futbolista (que no se niega a operarse) es pasar ahora por el quirófano, es lo que sucederá y la recuperación le demandaría unos cuatro meses.

El momento de la lesión de Weigandt

Después del partido contra Vélez, el propio Weigandt había expresado la negativa sobre los rumores que circulaban acerca de una operación en su hombro derecho: “Aclarando las versiones que dicen que me tendría que someter a una cirugía por la lesión del hombro quiero llevar tranquilidad e informar que estoy bien y que en los próximos días haré trabajos de rehabilitación para intentar acompañar al equipo en los próximos compromisos deportivos”, expresó el jugador Xeneize en su cuenta de Instagram.

Pero este martes, y después de realizar interconsultas, escribió: “Quiero agradecer todos los llamados y mensajes que he recibido, y también agradecer al club ,sus autoridades, cuerpo técnico y compañeros, y destacar el acompañamiento del departamento médico del club que me dio atención, dedicación y contención, y que me explicaron para que yo pueda interpretar que, de seguir jugando con esta lesión, se podría empeorar el cuadro y no sería beneficioso para nadie. En un primer momento, al sentirme bien, me traicionaron las ganas de jugar en el equipo de mis amores y pensé más con el corazón que con la cabeza, hoy después de haber hablado con los cuerpos médicos del club que me vio crecer y en los que confió plenamente, voy a someterme a lo que ellos crean necesario para volver en plenitud lo antes posible a dejar la vida en cada partido”.

En contexto: Weigandt, uno de los refuerzos que se sumó últimamente, había conseguido afirmarse como titular y era comprensible que buscara mantener su lugar en el primer equipo, a sabiendas de que una operación lo dejará afuera por lo menos hasta marzo próximo, con lo que se perdería la pretemporada, el comienzo del torneo local y posiblemente varios encuentros de Copa Sudamericana o Libertadores.

El médico aclaró que no podían obligar al jugador y que la decisión dependía de Weigandt y de su familia: “Estuvimos hablando con él y su papá durante media hora. Le recomendamos firmemente que se opere. Obviamente, le dimos todos los estudios para que lo vea un especialista de su confianza durante el día de hoy. Nos parece muy bien. Los papás se tienen que sacar las dudas. Mañana va a ver a un especialista en el que nosotros confiamos. Estamos seguros de que los dos le van a decir lo mismo y ahí la familia decidirá”. Efectivamente, durante este martes, el lateral derecho visitó a un experto que tiene dentro de su círculo íntimo, según le ratificaron a este diario desde el predio de Ezeiza, y allí tomó la decisión de ser intervenido.

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