Dos fechas después del superclásico, Guillermo cambió toda la defensa: Boca recibirá a Independiente con una línea de cuatro inédita

Aún cuando debió cambiar algunas piezas a lo largo del torneo, en 2017 Boca había logrado tener una defensa "de memoria". El lateral derecho era Gino Peruzzi, la dupla central con Santiago Vergini y Juan Manuel Insaurralde y el costado izquierdo para Frank Fabra . Así fue hasta el superclásico, el encuentro que causó un fuerte cimbronazo en el club de la Ribera. Después de aquella derrota, las determinaciones tácticas, las lesiones y ahora una suspensión desarticularon esa última línea, cuestionada tras el 1-3 ante River. Así, el equipo de Guillermo y Gustavo Barros Schelotto no contará ante Independiente, en principio el domingo a las 19, con ninguno de los cuatro jugadores que estuvieron hasta la caída ante el equipo de Marcelo Gallardo. Delante de Agustín Rossi este domingo aparecerán Leonardo Jara , Fernando Tobio , Lisandro Magallán y Jonathan Silva .

Para recibir a los Rojos, la dirigencia xeneize intenta que Gino Peruzzi vuelva a jugar por la aplicación del artículo 225, pero el intento parece ser estéril. El ex Vélez fue amonestado por quinta vez en el torneo frente a Estudiantes, pero la fecha a cumplir fuera de la cancha por esa acumulación de tarjetas amarillas flotaba en el aire sin caer su sentencia. Continuó en la formación por la participación de Marcelo Torres en el Mundial sub 20, un jugador que nunca fue siquiera al banco de suplentes en primera división. La AFA habilita esa maniobra, tan legal como cuestionable. En un momento se deslizó la idea de que desde Brandsen 805 iniciarían gestiones para volver a solicitarlo por Rodrigo Bentancur , que se encuentra en Corea del Sur con el seleccionado uruguayo, pero ese artículo del reglamento del torneo actual lo impide.

La defensa xeneize que estaba instalada se rompió tras el partido perdido en la 24° fecha. Las consecuencias no se hicieron esperar. Los severos problemas en retroceso ante River llevaron a los Mellizos a sacar del equipo a Vergini –que era, hasta entonces, el único jugador xeneize que había disputado todos los minutos del campeonato- y a Fabra. Remover al futbolista que pasó por Newell's, la Premier League inglesa y la Liga española fue consecuencia de una actuación individual desvencijada, corolario de varias en las que había dejado de mostrar seguridad. Contrariamente, sí fue llamativa la salida del colombiano, cuando los mayores problemas habían estado del otro lado, el de Peruzzi.

Para enfrentar a Newell´s los Mellizos optaron entonces por Tobio (que no jugaba desde la 10° fecha, ante Rosario Central) en la posición de primer marcador central y el lugar de Fabra lo ocupó Silva. El ex Vélez y Palmeiras aportó mayor velocidad en la zaga, sobre todo a la hora de los cierres y la cobertura a espaldas del lateral derecho, mientras que Silva no aportó mayor contención que el cafetero, del cual sí Boca extrañó sus proyecciones.

En la ajustada victoria ante los rosarinos Insaurralde debió ser reemplazado y con el diagnóstico posterior se supo que el campeonato había terminado para él: un desprendimiento muscular lo obligó a pasar por el quirófano y olvidarse del resto del torneo. La puerta parecía abrírsele otra vez a Vergini para formar dupla con Tobio, como lo había hecho en la mitad de las 14 fechas del torneo que se disputaron el año pasado. Sin embargo, los Barros Schelotto entendieron que su momento anímico y futbolístico lejos estaba de ser el óptimo. Apostaron así por Magallán, que en todo el torneo había disputado apenas dos minutos, frente a San Lorenzo.

Boca sigue puntero a cuatro fechas del final del torneo. El miércoles, cuando Atlético de Tucumán y River disputen en partido postergado de la 22° fecha, sabrá si su ventaja seguirá siendo de cuatro puntos o se reducirá a tres o apenas uno. Lejos de la versión que lo llevó al primer lugar de la tabla, la obligación que asume es la de mantenerse ahí hasta que se completen las 30 fechas del torneo; y lo buscará con una defensa que mutó por completo en apenas tres semanas.