¿El adiós de Diego Milito anticipa el retiro de Sebastián Saja? Dudas en medio de la emoción

Todos los ojos y los focos estaban centrados en Diego Milito, y muy pocos repararon en Sebastián Saja durante la tarde de Avellaneda. Más aún porque Temperley casi no inquietó y el arquero de la Academia apenas si tuvo que controlar un par de disparos débiles y bajar centros sin peligro.

Saja lleva desde fines del año pasando coqueteando con la posibilidad del retiro. Y este semestre no fue nada sencillo para él. Padeció lesiones en el codo, con intervención quirúrgica incluida, y en el sóleo; y sus actuaciones no tuvieron el nivel de temporadas anteriores.

Pero cuando terminó el partido, los compañeros repartieron casi tantos abrazos emocionados con el capitán que se despedía como con el Chino, el otro gran referente del vestuario. Y los sucesivos encuentros entre el 1 y el 22 fueron prolongados, emotivos, interminables. Sobre todo en el momento que el arquero le entregó la plaqueta recordatoria al goleador. Fue entonces cuando la duda quedó instalada: ¿y si ayer también se estaba produciendo la despedida de Saja?

No fue posible confirmarlo al final del partido, entre otros motivos porque a Racing le resta un último encuentro para cerrar el semestre. El miércoles en Formosa jugará ante Gimnasia y Tiro de Salta por la Copa Argentina, y si hubiera alguna comunicación al respecto debería quedar postergada hasta después de esos 90 minutos. Pero después de lo visto anoche convendría no descartar nada,

Es verdad que Sebastián Saja tenía razones suficientes para sentir ayer emoción. Diego Milito es más que su compinche en el vestuario de la Academia. Son también vecinos, y en estos dos años de convivencia las dos familias -esposas e hijos incluidos- han ido edificando una sólida amistad. Así, es lógico que sienta como nadie la marcha del hombre que regresó de Italia en 2014. Pero por otro lado, Saja lleva desde fines del año pasando coqueteando con la posibilidad del retiro. Y este semestre no fue nada sencillo para él. Padeció lesiones en el codo, con intervención quirúrgica incluida, y en el sóleo; y sus actuaciones no tuvieron el nivel de temporadas anteriores, más allá de alguna noche en la que fue figura, como ante Deportivo Cali en Colombia.

El cuerpo, más que el corazón y las ganas, le van marcando al Chino que el final de la carrera se acerca, y las dudas lo acechan. Aunque sus hijas le pidan que continúe, aunque le acerquen ofertas para ir al exterior que a estas alturas parece difícil que puedan tentarlo.

Por todo esto, las lágrimas de Saja llamaron tanto la atención en medio de la fiesta de despedida de su amigo Milito. Porque tal vez en su partido 202 con la Academia también estuviera diciéndole adiós a la gente del Cilindro.

Si así fuera, por ahora solo él, o quizás los más cercanos lo sepan. El resto deberemos estar atentos el miércoles, una vez que Racing comience sus vacaciones. No vaya a ser que Milito no se vaya solo...

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