La riesgosa odisea de Boca a Potosí, el consejo para el regreso y la probable formación para el debut en la Copa Sudamericana

Desde el día del sorteo de la etapa de grupos de la Copa Sudamericana Boca sabía que debería movilizarse 17.000 kilómetros para enfrentar a sus rivales. Pero más allá de la lejana ciudad de Fortaleza, en el norte de Brasil, y la cercanía con la sede del Sport Trinidense, en Paraguay, el periplo más complejo de los tres es sin dudas el que afronta antes del debut de este miércoles a las 21.

Ocurre que, para visitar a Nacional Potosí, el plantel xeneize viaja este martes en avión a Sucre, y una vez allí se desdoblará para trasladarse 158 kilómetros en una docena de camionetas 4x4 por una ruta compleja y peligrosa, que demanda más de tres horas de viaje.

Tan difícil es ese trazado que el domingo por la noche hubo allí un trágico accidente. El siniestro involucró a un micro y a una camioneta y dejó como saldo un total de cuatro muertos y más de 30 heridos.

De acuerdo con la información dada a conocer por Correo del Sur, el bus de Transtin Dil Rey salió a las 18 del domingo con destino a la capital boliviana y a las 20.30, cerca de Yotala, fue sorprendido por otro automóvil que invadió su carril. Ambos chocaron cerca de una curva y a gran velocidad, lo que resultó en que el vehículo de gran porte cayera por un barranco. Fuerzas de seguridad y el cuerpo de Bomberos acudieron al lugar del hecho para socorrer a las víctimas del choque.

Lo concreto es que para llegar al Estadio Víctor Agustín Ugarte (o Nido de los Cóndores, como se le llama al escenario ubicado a 3.900 metros sobre el nivel del mar) y jugar por primera vez en su historia en un escenario ubicado a tanta altitud, el camino será complicado. De hecho, no es casualidad que el club azul y oro haya optado por camionetas 4x4 en lugar de un micro, un vehículo mucho más inestable para este tipo de trazados.

Cómo será la travesía de Boca

El plantel xeneize tiene previsto tomar un avión hasta Sucre, que salió de Buenos Aires este martes 2 de abril a las 14. Una vez aterrizado en la capital boliviana, a 2400 metros sobre el nivel del mar, pasará ese día y la noche en diferentes hoteles (no hay ninguno con la capacidad suficiente para alojar a toda la delegación) y buscará adaptarse lo más rápido posible a los efectos que provoca la altura en las personas habituadas a vivir en el llano.

El miércoles por la mañana, jugadores, cuerpo técnico y dirigentes del Xeneize desayunarán en Sucre y luego iniciarán la travesía hasta Potosí en al menos 12 camionetas 4x4. Allí quedarán repartidos los casi 60 integrantes de la delegación azul y oro. El plan será almorzar en Potosí y se definió que el plantel haga una siesta antes de emprender el viaje final hacia el estadio.

De igual forma, la logística definida por Boca resolvió que una vez finalizado el encuentro, cerca de las 23.30, toda la delegación vuelva de inmediato a Sucre en esas mismas 4x4 y por el mismo camino utilizado en la ida, con curvas, barrancos y peligro, pero de noche.

Sin embargo, esto puede modificarse. Como consecuencia del trágico accidente del domingo, las autoridades de Sucre le pidió y le recomendó a la Conmebol y al club xeneize que la delegación argentina duerma en Potosí tras el partido y evite viajar por esa ruta peligrosa de noche.

De todas maneras, LA NACION pudo saber que Boca no tiene pensado alterar su plan inicial, aun cuando todos son conscientes del riesgo.

¿Por qué Boca no aceptaría esta sugerencia? Por dos razones. La primera es que en Potosí no hay hoteles con la capacidad suficiente para hospedar una delegación tan numerosa (60 personas). Por el otro, demorar el regreso complica la agenda posterior, ya que el viernes el plantel deberá subirse a otro avión para viajar a Rosario y enfrentar un día después a Newell’s, en un partido determinante en busca de la clasificación a los cuartos de final de la Copa de la Liga.

Entonces, tras el encuentro, el plantel dormirá en Sucre y recién tomará el vuelo de regreso a Buenos Aires el jueves por la mañana para encarar el siguiente compromiso, que será el sábado en Rosario ante Newell’s, por la fecha 13 de la Zona B.

Durante la fase de grupos de la Copa Sudamericana, los otros dos viajes del Xeneize serán a Brasil, para visitar a Fortaleza el 25 de abril, y a Paraguay, donde el 8 de mayo jugará con Trinidense en Asunción.

En tanto, en lo que respecta al torneo local, Boca recibirá a Godoy Cruz por la fecha 14 el domingo 14 de abril, y en una fecha que aun no fue definida completará los 63 minutos pendientes del partido con Estudiantes en La Plata, suspendido por la descompensación del futbolista del Pincha Javier Altamirano.

El probable equipo

Edinson Cavani, que salió en el entretiempo del clásico con San Lorenzo por una leve molestia, será el gran ausente en el estreno copero. El otro que no se subió al avión rumbo a Bolivia fue Marcos Rojo, recuperado de un fuerte desgarro que sufrió a fines de enero, pero reemplazado por Valentini ante el Ciclón por una pequeña molestia.

Otro que se queda en Buenos Aires es el colombiano Frank Fabra, ya que la Conmebol ratificó las dos fechas de suspensión por su expulsión en la final de la Copa Libertadores 2023 ante Fluminense, que deberá cumplir en la Sudamericana.

En resumen, la probable formación de Boca en su debut en la Copa Sudamericana ante Nacional Potosí sería la siguiente: Javier García; Lautaro Di Lollo, Aaron Anselmino, Nicolás Valentini, Marcelo Saracchi; Maurico Benítez, Jorman Campuzano o Jabes Saralegui, Juan Ramirez, Vicente Taborda; Darío Benedetto y Norberto Briasco.

UE Sant Andreu. El “tercero en discordia” de Barcelona, con hinchada de Primera y una historia de fábula que une a Dalí con Maradona

Polistas. Es magnate, va caminando sin custodia a Palermo y pone en jaque a Cambiaso, a quien tuvo contratado 16 años

Discriminación. Cómo el fútbol inglés margina a los entrenadores negros: "No tenemos oportunidades, eso te quita el alma"