Gimnasia y Argentinos abrieron la fecha con un empate sin goles

LA PLATA.- Salvo por la imagen del final, en la que Gimnasia por completo pareció dentro del área de Argentinos , sobre todo esa jugada en la que Pereyra se estiró y no pudo empujar la pelota a centímetros de la línea, el desarrollo nunca se apartó de lo previsible. Y eso que los platenses insistieron por todos lados, con pelotazos que parecieron flechas al aire. Así, al final, se despidieron como se saludaron al comienzo: 0-0. Porque al Lobo le faltó puntería pese al dominio y al entusiasmo. Y porque a Argentinos le alcanzó con llevarse un punto y luchó por eso durante todo el partido. Caruso Lombardi lo pensó y, pese a que en los últimos minutos se vieron desbordados, sus jugadores lo ejecutaron.

Todo fue muy cambiante. En el comienzo fue mejor Gimnasia que, en menos de cinco minutos, tuvo dos buenas situaciones: Migliore resolvió el tiro de Licht y el remate de Pereyra pegó en el travesaño. La iniciativa no le duró demasiado porque Argentinos se recompuso poco a poco. Lo hizo por mérito propio y por errores ajenos. El Lobo, sobre todo en la ofensiva, siempre tomó malas decisiones.

El equipo de la Paternal también se animó. Tanto que también tuvo una buena oportunidad: Ramírez dejó solo a Boyero, cuyo intento también rebotó en el travesaño.

Las posiciones se agudizaron en la segunda parte. Gimnasia mostró la misma cara, pero tuvo más determinación. La mantuvo durante casi toda la etapa y, como se dijo, la potenció en el final, cuando se jugó entero para reencontrarse de una vez por todas con la victoria (hace seis partidos que no gana, con cuatro empates y dos caídas). No pudo porque Argentinos se cerró bien y todos los intentos cayeron en el mismo embudo. Los visitantes dependieron demasiado de Rodrigo Gómez y casi nunca atacaron. El libreto estuvo bien aprendido

El susto de Barraza

A los 16 minutos del segundo tiempo fue retirado en ambulancia por precaución el capitán de los Bichitos Colorados, Julio Barraza, debido a un traumatismo de cráneo que le ocasionó, en forma involuntaria, su compeñaro Leonardo Sánchez. De todos modos, Barraza fue derivado al Instituto Médico Platense como medida de precaución.