Italia: Milan se lo dio vuelta a Inter y calentó la lucha por la punta; Mourinho explotó contra el VAR

Cuando Lautaro Martínez fue reemplazado a los 24 minutos del segundo tiempo, Inter ganaba 1-0. Es habitual que Simone Inzaghi sustituya al Toro, que rara vez completa los 90 minutos. En esta ocasión estaba más que justificado porque hacía menos de 96 horas había jugado 68 minutos -y marcado el gol del triunfo- para la Argentina contra Colombia y luego cruzó el Atlántico.

Lautaro había originado el gol del puntero de la Serie A con un remate de media distancia que el arquero Maignam desvió al córner. Lo ejecutó Calhanoglu, un ex-Milan, e Ivan Perisic, llamativamente solo, conectó el centro con un toque cruzado. El 1-0 le permitía al defensor del título sacarle -con un encuentro menos- siete puntos a Milan, su inmediato perseguidor. Hubiese sido un paso decisivo en su objetivo de revalidar el scudetto.

Seis minutos después de que Lautaro le dejara su lugar a Alexis Sánchez -gran figura en el decisivo 3-2 de Chile en la altura de La Paz-, Milan le empezó a dar forma a una recuperación sorpresiva, de la mano de un delantero, Olivier Giroud, que en su larga carrera acumuló varios elogios, pero no el de ser un goleador serial, un killer del área. En el actual torneo llevaba cinco goles en 14 fechas. En 2018 fue campeón del mundo de Francia sin convertir en siete cotejos.

Lo más destacado del clásico de Milán

En tres minutos, el delantero de 35 años se erigió en el héroe del clásico, con dos tantos que dieron vuelta la historia. En el empate estuvo en la gestación de la jugada, con una embestida sobre Alexis Sánchez cerca del círculo central que pareció foul. No cobró nada el árbitro ni hubo intervención del VAR tras el gol de Giroud, que ingresó por el segundo palo para corregir un remate cruzado de Brahim Díaz.

Milan aprovechó su momento ante un Inter que parecía conmovido. Giroud enganchó de taco con la zurda para sacarse de encima a un defensor y marcó el 2-1 con un tiro cruzado. Golazo. Quedaba 12 minutos, más el descuento, y a Inter no le alcanzó ni con la subida del arquero Handanovic a buscar el último centro. El final fue caliente, con la expulsión de Theo Hernández, algunos empujones y la euforia del entrenador Stefano Pioli, que festejaba subido a sus jugadores. “Entreno a muchachos que nunca se dan por vencidos, que saben sufrir. apretar los dientes contra un rival fuerte. Queríamos ganar. Estoy muy orgulloso y feliz por nuestra afición, que merecía esta alegría”, expresó Pioli.

Inzaghi ensayó una autocrítica: “Haremos un análisis, tenemos que poner más ganas y coraje en los próximos partidos. Merecíamos más porque estuvimos arriba hasta el minuto 70. Tenemos que salir más fuertes porque perder así duele a todos”.

El triunfo de Milan reabrió la lucha por el campeonato. También consolidó la recuperación que el equipo rojinegro ya había evidenciado en la temporada pasada, tras varios años de mediocridad. Le cortó a Inter una racha de 16 partidos sin derrotas como local. Desde 2004 que no revertía una desventaja derby della Madonnina y mantuvo una racha positiva con dos victorias y un empate en los últimos tres enfrentamientos. No se imponía dos veces seguidas de visitante desde la racha de 6 victorias seguidas entre 1999 y 2005. En Inter todavía no está en condiciones de reaparecer el lesionado Joaquín Correa.

Explotó Mourinho contra el VAR

Roma no le pudo ganar a Genoa, penúltimo en las posiciones. Empató 0-0 en el estadio Olímpico. No hubo gritos de gol, pero sí quejas altisonantes de José Mourinho después del cotejo. El entrenador de Roma estaba enfurecido por la aplicación del VAR que no convalidó un gol de Nicolo Zaniolo.

En un principio se pensó que estaba en posición adelantada, pero la jugada fue invalidada por un foul previo de Abraham (Roma) a Vásquez (Genoa) que el árbitro Rosario Abisso no advirtió hasta que intervino el VAR. Tras revisar la acción en el monitor del campo, Abisso no otorgó el gol.

La situación enfureció a Mourinho, que se descargó en la conferencia de prensa: “El juego que se convirtió en el juego del pueblo hace muchos años, el juego que enamoró al mundo, ha cambiado. El fútbol es otro deporte. Hay que cambiarle el nombre”.