La piedra en el zapato de Ariel Holan: Ezequiel Barco se ausentó de las prácticas de Independiente por segundo día consecutivo

Fastidiado por el intento de Independiente de subir cada vez más el precio de su pase en cada etapa de la negociación que lo llevaría al fútbol de Estados Unidos, Ezequiel Barco se ausentó por segunda día consecutivo por Villa Dominico para el trabajo, en un año de varias competencias para el conjunto de Avellaneda. Barco estaba vendido de palabra a Atlanta United por 12 millones de dólares, pero los dirigentes dieron marcha atrás tras la obtención de la Copa Sudamericana. El delantero tiene un vínculo hasta mediados de 2019 con la entidad que dirige Hugo Moyano.

Consultado por la ausencia de una pieza clave en su esquema de juego, Ariel Holan procuró despegarse de la situación: "Independiente está en un proceso de consolidación económica y financiera. Entre el futbolista y los dirigentes deberán evaluar qué es lo mejor. Si es bueno para Independiente y es bueno para Barco, yo no tengo nada para decir al respecto. El club necesita una consolidación institucional, por eso la venta de (Nicolás) Tagliafico, el capitán del equipo, que ha sido un bastión importantísimo durante el año pasado".

Las negociaciones siguen y ahora Independiente pretende US$ 24.000.000 por el mediocampista. Atlanta, que ya arregló el contrato con el jugador, no quiere extenderse a esa cifra. Mientras tanto, en este relanzamiento de su ciclo, Ariel Holan sabe que sería fundamental volver a contar con Barco, a quien el entrenador trató de convencerlo sobre la conveniencia de ir a una liga más jerarquizada que la norteamericana.