Tras la sentencia, las claves para entender el "Caso Acro"

2006, el comienzo del fin. Un grupo de barras ingresó al estacionamiento del club tras un 1-3 ante Racing y dañaron los autos de los jugadores.

"La batalla de los quinchos". En la antesala de un partido ante Lanús, por la primera fecha del Clausura 2007, se produjo una feroz pelea entre las bandas de Adrián Rosseau y Alan Schlenker, en los quinchos del club de Núñez. El hecho desató una escalada de violencia. La interna en la barra había germinado en el Mundial de Alemania.

Mayo de 2007. Pintadas en el colegio de las hijas de José María Aguilar, cruce entre barras en un partido frente a Independiente y el frente de la casa de Adrián Rosseau baleada por desconocidos fueron parte de un mes caldeado.

Amenaza a un representante. Julio Macchi, por entonces vice de River, negó en junio de 2007 que un hecho de amenazas a un representante ligado a Daniel Passarella tenga vínculo con la barra del club. "Ahora lo único que falta es que nos acusen del calentamiento global", sostuvo.

Matan a Gonzalo Acro. El 7 de agosto de 2007, alrededor de las 23.10, Martín Gonzalo Acro y Osvaldo Gastón Matera fueron emboscados por un grupo de al menos cinco hombres. Fueron cuatro disparos de arma de fuego calibre 6.35 mm contra Acro y Matera, tres de los cuales impactaron en el cuerpo del primero -dos en la cabeza y uno en la pierna izquierda-, según consta en el informe del fiscal José María Campagnoli, al que tuvo acceso canchallena.com . Acro muere dos días después en el Hospital Pirovano.

La sospecha. El fiscal sostiene que "toda la operación fue organizada por Alan Schlenker y William Schlenker con Martín Maximiliano Lococo, quienes dirigieron el accionar de los agresores, en ejercicio del mando que les confiriera su status de líderes de la facción Los Borrachos del Tablón". Califican legalmente el hecho como "homicidio calificado". Acro se ubicaba en el bando de Rousseau, opuesto a Los Borrachos. La existencia de contactos telefónicos entre los tres nombrados en un espacio acotado de tiempo resultó prueba suficiente para creer en la existencia de un plan tendiente a acabar con la vida de Gonzalo Acro.

Se entregan y confiesan. Tras estar prófugo, en diciembre se entre Alan Schlenker. Ya habían sido detenidos su hermano, Lococo y Sergio Piñeiro. Además, detienen en Italia a Ariel Luna, quien había confesado la autoría del crimen desde la clandestinidad.

"No soy asesino". Luna dice que le pagaron por hablar, pero en abril de 2009 queda procesado como "autor material". En noviembre, le conceden la excarcelación a los hermanos Schlenker por estar dos años presos sin sentencia firma.

El comienzo del juicio oral. En marzo de este año se inicia el juicio oral, con Alan, William y Lococo (instigadores), Luna (autor material) y Piñeiro, Pablo Girón y Rubén Pintos (coautores). Las semanas posteriores pasa de todo: Piñeiro es internado por una crisis nerviosa, un fiscal de San Isidro detiene a Alan por un mes -por el presunto homicidio de un vendedor de drogas en 2001- y es liberado al pagar la fianza y, por último, los abogados querellantes piden "prisión perpetua" para todos los imputados.

8 de septiembre de 2011. Los hermanos Alan y William Schlenker, ex integrantes de la barra brava de River Plate, y otros tres imputados fueron condenados ayer por la tarde a prisión perpetua por el crimen de Gonzalo Acro, asesinado en el barrio porteño de Villa Urquiza en 2007. El veredicto fue dado a conocer por el Tribunal Oral en lo Criminal 15, que impuso la pena máxima a Ariel "Colo" Luna, Rubén "Oveja" Pintos y Pablo "Cucaracha" Girón y 10 años de prisión a Martín "Pluto" Lococo, aunque todos seguirán en libertad, hasta que la sentencia quede firme.