Newell’s - River. Ignacio Scocco tiene una manía: hacerle goles al equipo contra el cual no los festeja

ROSARIO.– Ignacio Scocco es un goleador. Convertir es una costumbre que mantiene desde su debut, por abril de 2004, de la mano de Américo Gallego. Y donde estuvo marcó goles importantes y contribuyó a ganar partidos trascendentes y títulos. Lo hizo en Newell’s y en River, los dos clubes por los que ha sentido amor y pertenencia.

Con la camiseta rojinegra, Scocco tiene una manía: hacerle goles a River. Le marcó ocho, y el cuadro millonario es el rival argentino más vencido por el delantero. Lindos tantos en general. Golazos, varios. Decisivos, algunos. Como aquel de 2013 que retribuyó una victoria por la mínima diferencia y encaminó al título al equipo dirigido por Gerardo Martino.

El gol del 1-1 a River, no festejado

Hoy aparecen como sólo estadísticas, porque el 4-1 de River en Rosario de este miércoles eclipsa esos antecedentes. E incluso también el desempeño más que aceptable del propio ex atacante millonario. En medio de un andar más que preocupante de Newell’s, y a las órdenes de un entrenador, Fernando Gamboa, que ya perdió el rumbo que había parecido tomar al inicio del Torneo 2021, Scocco mantuvo un nivel parejo y anotó cuatro goles. Es el único jugador rojinegro que pasó el “aprobado” a lo largo de las once fechas del certamen.

Esta vez, sus intervenciones fueron de más a menos. El número 32, de 36 años, entró activo y con ganas. Tocó de primera, incomodó a la defensa y manejó los ritmos de su equipo. Asistió con un “no-look pass” de primera a Maximiliano Comba, que pudo conseguir el empate a los siete minutos. Merodeó el área con peligro y recibió dos fouls en la puerta (uno no cobrado de Bruno Zuculini y uno de Enzo Pérez). Siempre intentó llevar riesgo al arco de Franco Armani.

Su búsqueda dio frutos cuando a los 35 minutos fabricó una jugada en tres cuartos de cancha y, tras acomodarse, el capitán sacó un remate fuerte y cruzado que dejó lejos del alcance al arquero. Otro golazo “made in Nacho”, como tantos que le marcó a su River. No lo celebró, claro.

Apenas iniciado el segundo tiempo tuvo en su botín derecho el 2-1, pero su toque de empeine con prestancia ante la salida de Armani se fue afuera por pocos centímetros. Luego River encontró en una jugada fortuita el segundo gol, y desde entonces la superioridad del visitante fue notoria. El local decayó mas allá del esfuerzo de Scocco hasta el último minuto.

Compacto de Newell’s 1 vs. River 4

Newell’s arrastra seis encuentros sin ganar, con un saldo de dos empates y cuatro derrotas, y Gamboa ya empieza a ser mirado con desconfianza. El domingo habrá elección de autoridades del club en un clima de violencia y amenazas. Así vive Newell’s. En un ambiente que nada tiene que ver con la categoría de su gran referente del gol.