Quilmes ganó sobre la hora y profundiza la crisis de Arsenal
Bieler marcó el tanto en el último segundo, de penal; jugaron en Sarandí, a puertas cerradas
Ni Arsenal ni Quilmes encontraron cómo disimular sus limitaciones. Especialmente Arsenal, que va de mal en peor; cuando un equipo está en su situación no extrañan los golpes como el de hoy: perder en el tiempo de descuento y por un penal sin sentido un partido que se dirigía al empate.
Un partido, por cierto, muy malo, lleno de imprecisiones que condujeron a fricciones y exceso de pierna fuerte. La falta de ideas fue un problema compartido, aunque Quilmes hizo algún intento de tratar bien la pelota, conducido por Chirola Romero y Canelo. Curiosamente, fue el local el que contó con las chances más claras, apenas un par.
Cuando el partido iba al olvido, Rosero Valencia le cometió penal a Canelo, que Bieler transformó en el 1-0. El juez Pezzotta había ignorado otro del colombiano en el final del primer tiempo, una clara mano.
Hundido, Arsenal -en el vestuario, según una versión, hubo reproches de dirigentes al DT interino, Roberto González- aceleraría la búsqueda de entrenador. En Quilmes, Falcioni ganó algo de aire. "Me quedo tranquilo por el triunfo, no por cómo jugamos. Pero era importante ganar", dijo el Emperador.