Los golazos de River ante Estudiantes: lujo de González Pirez y definición de primera de Beltrán y bombazo de De la Cruz

Apenas había pasado un minuto de juego, pero River ya demostraba por qué es el equipo que presiona más alto en el campo en toda la Liga Profesional. Leandro González Pirez anticipó en terreno rival, se llevó la pelota, inventó un lujo para dejar atrás a un marcador y divisó a Lucas Beltrán en camino hacia el arco de Estudiantes de La Plata. Hacia él fue la pelota. El delantero no lo pensó dos veces: definió de primera, como tantas otras veces, y generó el delirio de los hinchas millonarios. Fue su undécimo festejo en el torneo. Y puede valer un título.

Lejos de asustarse por la escenografía de un Monumental imponente (casi 86 mil personas en las tribunas), River salió decidido a definir el partido por la vía rápida y asegurarse el título número 38 a nivel local. Trianguló como tantas otras veces y se plantó en territorio en enemigo. Como tantas otras veces. El gol de Beltrán fue el corolario a esa voracidad ofensiva. Y se trató del tanto más rápido del ciclo de Martín Demichelis.

El gol de River fue gestado por dos de los mejores futbolistas de River en la temporada. El anticipo de González Pirez a Guido Carrillo, con el posterior sombrerito a Santiago Ascacíbar demostró por qué el defensor se erigió en una de las columnas de la última línea del equipo millonario. Titular inamovible. Luego, divisó al goleador del ciclo Demichelis, Lucas Beltrán. El cordobés sacó un tiro esquinado, inalcanzable para Daniel Sappa, el arquero del Pincha. El goleador juvenil es otro de los que se erigió como uno de los puntales del equipo. Además de ser el máximo anotador del equipo (11 tantos), sentó en el banco de suplentes a los delanteros “importados” en los que River había encargado el trabajo de hacer los goles: el colombiano Miguel Borja y el venezolano Salomón Rondón.

El segundo, otro golazo

River encontró el segundo gol en el minuto 18 a través de uno de sus futbolistas más en forma. El uruguayo Nicolás De la Cruz se encontró con la pelota tras un despeje fallido de Luciano Lollo. Sin dudarlo, empalmó la pelota en la puerta del área y el balón se incrustó (otra vez) pegado al palo derecho del arco defendido por un incrédulo Sappa. Fue el cuarto gol consecutivo de De la Cruz en el Monumental. Y el segundo golazo de River en el partido que puede darle el título en la Liga Profesional.

El tercero, con un pase top de De la Cruz

El 3-0 de River llegó de penal, pero tuvo en su gestación una gran jugada colectiva. Que comenzó con un pase de cachetada y bien profundo de De la Cruz. El uruguayo dejó a Ignacio Fernández mano a mano con Sappa, el arquero del Pincha. Llegó primero el futbolista millonario y al arquero no le quedó otra alternativa que frenarlo con infracción. Se hizo cargo Esequiel Barco y, con una definición esquinada, selló el 3-0. El título parece ser, entonces, apenas cuestión de tiempo.

La jugada que terminó con el penal le sacó una enorme sonrisa a Demichelis. El entrenador millonario, puño apretado, festejó mirando hacia la tribuna. El ex defensor central no abandonó su rostro de felicidad desde que salió a la cancha. El equipo hizo lo suyo para mantenerle el gesto, cumpliendo a la perfección el guión imaginado por el entrenador. Y superando a su rival en todas las líneas.

El penal convertido por Esequiel Barco

Ovación para Enzo Pérez

A los once minutos del segundo tiempo, Demichelis eligió reemplazar a Enzo Pérez, capitán de River. El Monumental se vino abajo. “Enzo es de River, y de River no se va”, se escuchó. “Olé, olé, olé...Enzo, Enzo”, gritaron los hinchas. El estandarte millonario saludó a los cuatro puntos cardinales del estadio, apuntó al escudo en su camiseta y levantó un brazo en señal de agradecimiento. Ya rumbo al banco de suplentes, se fundió en un abrazo con su entrenador. Y volvió a agradecer el cariño de los hinchas.

El descuento de Estudiantes

A los 22 minutos del segundo tiempo, el equipo platense encontró el descuento en un buen contragolpe. River perdió la pelota en la mitad de la cancha, el uruguayo Mauro Méndez condujo, habilitó a Leonardo Godoy y el propio Méndez definió de primera para conseguir su segundo gol en el torneo.

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