Tres palos y a la bolsa: el lado oculto de Guillermo Sara

Cuando todavía no era el arquero de Boca y comenzaba a ser suplente en Atlético de Rafaela, hubo una tarde en la que Guillermo Sara no sabía qué hacer. Terminó yendo al Jockey Club de Rafaela a jugar al golf, a propuesta de su amigo Agustín, que lo practicaba desde chico. Aquel día el hoy Nº 1 xeneize no imaginó que se engancharía con este deporte al que considera "de mucha concentración y precisión" y que "implica mucha exigencia", característica lo motiva. Pero no todo es tensión: "Se comparte un lindo momento con amigos, y así se lo disfruta el doble", rescata.

"Comencé a los 20, más o menos. Al año y medio compré mis primeros palos, cuando empecé a tomarlo con más seriedad". Desde entonces "El Melli" trata de practicarlo una o dos veces por semana, cuando puede, ya que el calendario de torneos, copas, la paternidad reciente y otras exigencias no se lo permiten. Remarca que es muy importante jugar a menudo para no perder el ritmo.

En 2013 se fue a España para defender los colores de Betis, en Sevilla, pero no dejó de despuntar el vicio. "Había tres o cuatro canchas y tenía un profesor con el que jugaba bastanteseguido", cuenta. Tan aficionado se volvió que el médico del club andaluz tenía una cancha en su propia casa y Guillermo la aprovechaba para jugar.

Sea en su ciudad o en Buenos Aires, trata de no perderle pisada al golf. "En Rafaela tengo a mi grupo de amigos con los que juego cada vez que voy. Y también tengo gente conocida en los clubes de Buenos Aires. Pero mi profe de golf es la persona con la que más practico", cuenta Sara, que se dio el gusto de compartir muchas salidas con Carlos Tevez. "Hemos jugado mucho. Cuando llegó a Boca charlamos mucho sobre el deporte. Él tiene muchos conocidos que lo practican", sostiene el arquero. De los compañeros del plantel actual, Federico Carrizo es otro que se anima y Darío Benedetto acaba de sumarse al deporte de los palos.

Juega bien el rafaelino. A sus 29 años, ya con ocho en esta disciplina, conoce bastante de canchas. "Hay muchas lindas y difíciles en Buenos Aires; la del «country» de Rafaela [así se le dice al Jockey de allí] también tiene lo suyo", evalúa. Pero cuando se fue de luna de miel a Hawaii con Cecilia tuvo el placer de jugar en el Plantation Course de Kapalua, en la paradisíaca isla de Maui, en la que todos los años se desarrolla el torneo SBS del PGA Tour. "Es espectacular, tiene un paisaje tremendo. Fue hermoso jugar ahí", se complace.

El arquero de Boca atravesaba uno de los mejores momentos de su carrera cuando apareció la lesión en el hombro derecho, que le suspendió el fútbol... y el golf, claro. Pero mantiene el buen humor. Y piensa en el futuro lejano. "La idea es seguir jugando al golf una vez retirado. Se puede jugarlo toda la vida; lo importante ahora es aprender lo más posible para, el día de mañana, seguir disfrutándolo, y con mucho más tiempo", concluye el hombre que en los estadios intenta evitar que la pelota entre, y que en los links hace exactamente lo opuesto...ß

otros golfistas

El golf es la segunda disciplina de muchas figuras del deporte. Entre otros, lo practican Diego Maradona, Gabriel Batistuta, Carlos Tevez, Josep Guardiola, Michael Jordan, Rafael Nadal, Pete Sampras, Adolfo Cambiaso y los hermanos Pieres.