Río 2016. La esgrimista argentina quedó eliminada y se quebró: "La gente no sabe lo que dice"

RÍO DE JANEIRO.- Apenas terminó la pelea y se bajó de la pasarela de combate, la esgrimista argentina María Belén Pérez Maurice empezó a llorar. La sonrisa que se dibujaba en su rostro era por los nervios. Las lágrimas que caían por sus mejillas, de tristeza. El sueño olímpico, la preparación de años (quizás, de toda su vida), había durado sólo una pelea. Sí, debut y despedida para la especialista nacional en la competencia de sable de los Juegos Olímpicos Río 2016.

Pérez Maurice, de 31 años, era la única representante de nuestro país en esgrima. El entusiasmo se dejaba ver en sus saltitos precompetitivos. Pero nada puso hacer frente a la subcampeona mundial, la francesa Cecilia Beder, y cayó por un claro 15-6 en la pedana de la Arena Carioca 3.

“La gente que no sabe dice: 'La argentina cayó rápido'... Pero estar acá como argentino es un logro. Tengo bronca por los errores que cometí, pero estoy luchando contra la subcampeona del mundo. Francia es un país muy fuerte y estar ahí ya es un oro, pero uno quiere ganar igual. No voy a parar hasta conseguir mi objetivo. Ahora en Tokio 2020 voy a estar”, expresó la argentina, sin poder contener las lágrimas.

Y sentenció: "Hasta no conseguir el objetivo no voy a parar. De acá a cuatro años tenemos que crecer todos, yo y la esgrima también".

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