Las dos caras de Nalbandian: su ranking y su tenis

Un combo de saque abierto y definición cruzada; un revés paralelo exquisito; una definición soberbia de drop tras un peloteo intenso; una volea cruzada con clase para definir el match-point. La escena puede pertenecer a cualquier ATP de Buenos Aires de los últimos años. En todos, el protagonista es David Nalbandian.

Pasan las ediciones del torneo porteño y el unquillense, pese a las 12 temporadas encima y 30 años a cuestas, sigue regando el court central del Buenos Aires Lawn Tennis con su magia. Anoche borró de la cancha a un Juan Mónaco envalentonado cediendo apenas cuatro games.

Semejante demostración de calidad, sin embargo, desnuda una contracara en el Rey David: ocupa el puesto 85 del ranking mundial y el 6° a nivel país, detrás de Del Potro (10°), Mónaco (20°), Chela (31°), Berlocq (43°) y Leo Mayer (76°).

Entonces, su tenis, ¿es una contracara de su ranking o refleja los vaivenes que últimamente sufre por las reiteradas lesiones? El propio David lo explicó tras el sólido triunfo ante Pico: "El ranking 85° es el real. Este año lo planteé como muchos otros, pero a veces pasa que quizás las cosas no se dan de la mejor forma; con continuidad, el ranking no me preocupa."

Si dentro de la cancha se vio un nivel de tenis de un top 20, ¿por qué no logra la continuidad de otros años? "El calendario es muy duro, pero les puedo ganar a los mejores si me siento bien y jugando un buen tenis", agregó el último campeón argentino del ATP porteño, en 2008.

El ranking, necesario también para ir a Londres. Al margen de su juego y sus explicaciones, Nalbandian precisa sumar puntos y ascender en el ranking porque, de lo contrario, podría perderse uno de sus máximos sueños aún por cumplir: los Juegos Olímpicos de Londres, en Wimbledon.

De la cita olímpica, en el mítico All England -donde David fue finalista en 2002- participarán quienes figuren entres los 56 mejores del ranking al día 11 de junio (seis semanas antes del torneo) y habrá un máximo de cuatro jugadores por país. Es decir, si se jugara el próximo lunes, el cordobés quedaría al margen por ambas condiciones. "¿Los juegos? Ojalá los juegue; hoy no estoy adentro, pero si tengo continuidad me gustaría. Es un objetivo."

Pero, con cuatro meses por delante, Nalbandian tiene todo para sumar, ya que no defiende puntos en los próximos torneos grandes: los Masters 1000 de Indian Wells, Miami (le concedieron la wild card que pidió), Roma, Madrid y Roland Garros, que es el último certamen que puntuará para los Juegos de Londres.

Esta noche, por lo pronto, tendrá una suerte de "duelo olímpico" ante Carlos Berlocq, quien hoy ocupa la cuarta plaza para representar a la Argentina. Aunque, se sabe, cuando Nalbandian entra a la cancha no importa su ranking.

El ranking de Nalbandian, al final de cada temporada: