Altair Domingos: “Hi Happy ganó el Gran Premio Nacional con el corazón”

Se ganó la comisión como nunca antes Altair Domingos. Parecía que al favorito Hi Happy se le hacía cuesta arriba remontar la diferencia con el escurridizo puntero Old Bunch y lo hizo con el disco delante de los hocicos. "Faltando 300 metros no llegaba; faltando 200 metros tampoco. Ya en los 100 pensé que no ganábamos más y cuando restaban 50 metros cambió de mano para vencer", dijo el jinete. Ese último movimiento, el que hacen los caballos para volver a traccionar y tomar impulso fue el envión ganador.

"El potrillo tuvo una buena largada. Fue ágil para acomodarse antes del primer codo y por suerte no hubo que regalar terreno en el primer codo. Ya en la recta opuesta venía llevándoselos por delante", continuó el relato Domingos, que nació en Misiones el 5 de marzo de 1981, pero se crió en Brasil, donde la familia se radicó cuando él tenía siete meses.

"El entusiasmo por lo bien que venía Hi Happy se fue haciendo preocupación cuando en la recta el puntero no se paraba. Pensé que se iba a entregar antes, pero no se rindió. Al final, cumplí el sueño de todo jockey al ganar esta carrera", agregó Altair, antes de pararse en la tarima en la que estaban las copas y recibir una ovación.

Hi Happy mantuvo su invicto en cinco carreras. Desde 1989, cuando ganó Cheyenne, que un caballo no lograba defender su foja inmaculada en el final de la Triple Corona . En su caso, hay un condimento: atrás quedó el sabotaje que sufrió en su stud en junio. Ahora es tiempo de gloria, con su tercer triunfo de Grupo 1, serie que incluye el Jockey Club. "En el césped es más ágil. Esta vez, en la arena, ganó con el corazón", remató Domingos.