George Soros concretó otro gran negocio

El tradicional establecimiento ganadero El Meridiano, ubicado en la localidad bonaerense de General Villegas y que fuera propiedad de la familia Sauze, fue vendido por la compañía Cresud a la firma Pilagá SA Ganadera -del Grupo Pilagá-, en la suma de 11.029.370 dólares.

En abril de 1996, Cresud había adquirido el campo de 6300 hectáreas al valor de 6 millones de dólares, por lo que esta venta (descontados los gastos de escritura e inversiones realizadas) representó una ganancia aproximada de 4 millones de dólares para el grupo del empresario George Soros.

Fuentes de la empresa informaron que, al momento de recibir el campo en 1996, la infraestructura del establecimiento no estaba en las mejores condiciones, por cuanto hubo que reacondicionar el aparato productor: renovar las pasturas, construir aguadas, reparar los alambrados perimetrales, realizar una adecuada rotación de la tierra, entre otras obras. Para estos trabajos se invirtieron aproximadamente 700.000 dólares.

Agregaron además que esta operación forma parte de la estrategia de la empresa de generar resultados tanto por medio de sus actividades productivas como de la realización de parte de sus activos, para su reinversión en operaciones de más alto margen dentro del negocio.

Por su parte, el director ejecutivo de la empresa, León Belloc, informó que el objetivo de la compra de El Meridiano es continuar concentrando la producción ganadera cerca del Frigorífico Hughes, perteneciente al grupo, de modo de afianzar el proceso de integración vertical de las actividades, iniciado hace más de dos años.

Pilagá SA Ganadera se dedica a la cría, engorde y comercialización de ganado vacuno, a la producción y comercialización de arroz y de otros productos agrícolas como trigo, sorgo, lino, girasol, maíz y soja, y a la producción y comercialización de semilla de arroz.

El establecimiento fue, desde su origen, una explotación destinada exclusivamente a la cría de hacienda Aberdeen Angus y fueron característicos sus remates en los que se daban cita los principales cabañeros del país.

La familia Sauze estuvo al frente del establecimiento hasta principios de la década del 80.