Cinco razones para amar a Dan Stevens

*1. SENSATEZ Y SENTIMIENTOS (2008)

Si bien la miniserie de Sensatez y sentimientos carece de esa empatía por los inolvidables personajes creados por Jane Asusten que sí tuvo el film de Ang Lee escrito y protagonizado por Emma Thompson , logra equilibrar sus falencias con una desparpajo muy poco habitual en el sinfín de adaptaciones que se han hecho de las obras de la autora. En ese sentido, la miniserie británica escrita por Andrew Davies puede ser emparentada con el corrosivo humor que vimos en la reciente Amor y Amistad de Whit Stillman.

Por otro lado, Stevens le hace justicia al rol de Edward Ferrars, ese hombre que simplemente busca hacer lo correcto, aunque eso lo distancie de su propia felicidad. Analizada en retrospectiva, Sensatez y sentimientos era el prefacio ideal para la interpretación más famosa que brindó Stevens en televisión: la de Matthew Crawley en Downton Abbey .

*2. DOWNTON ABBEY (2010-2012)

El antes y el después de Downton Abbey, la multipremiada creación de Julian Fellowes, estará por siempre asociado al personaje de Matthew Crawley. Stevens personificó al encantador marido de Lady Mary ( Michelle Dockery ) con una mezcla infalible de bravura y sensibilidad, dos rasgos propios de ese hombre que se rehusaba a moverse dentro de las normas tradicionales. Luego de que la audiencia se encariñara enormemente con el personaje, Fellowes le escribió una muerte muy poco inspirada con el recurso del accidente de tránsito como ineludible cliché.

Sin embargo, fue Stevens quien decidió abandonar la serie luego de tres temporadas y tiempo después explicaría los motivos: "Personalmente, quería probar cosas nuevas en mi trabajo, y Downton Abbey era una serie que lo monopolizaba todo. Por lo tanto, cuando me fui me sentí extrañamente liberado y al mismo tiempo triste porque quería mucho al programa y ese aprecio va a estar siempre", aseguró el actor, quien en el mismo año de su partida del drama comenzó a virar hacia el mundo cinematográfico.

*3. VAMPS (2012)

La realizadora norteamericana Amy Heckerling trazó una filmografía muy extraña luego de haber concebido esa enorme comedia de culto que fue Ni idea en 1995. Posteriormente, la cineasta se volcó a la fallida adaptación televisiva de dicho largometraje y a otras películas del género como la subvalorada Loser - con Jason Biggs y Mena Suvari a la cabeza - y la más convencional El novio de mi madre. Vamps, su última producción hasta la fecha, nos mostraba a una Heckerling deseosa de retomar el humor más desenfrenado y agudo de Ni idea, por lo cual volvió a formar dupla con Alicia Silverstone .

La actriz interpreta a Goody, una mujer vampiro que se amiga con su condición gracias a la invaluable compañía de Stacy ( Krysten Ritter ), quien también goza de la inmortalidad. Si bien no del todo lograda, Vamps tiene algunos momentos en los que Heckerling se muestra afiladísima y el personaje de Stevens (Joey, nada menos que el hijo de Van Helsing que enamora a Stacy) circula por ese carril.

*4. UN PASEO POR LAS TUMBAS (2014)

El personaje de Kenny Kristo aparece de manera efímera en Un paseo por las tumbas. Sin embargo, cuando lo hace, Stevens proyecta con melancolía ese tormento interior de un hombre que sucumbió a la oscuridad luego del secuestro de su esposa. Ya muy alejado del tono de Downton Abbey, el actor construye una suerte de anti-galán que busca los servicios de otro individuo que no tiene nada por perder, el ex detective devenido investigador Matthew Scudder ( Liam Neeson en uno de los tantos roles sombríos a los que nos tiene acostumbrados).

En la secuencia en la que Kenny debe persuadir a Matthew para que acepte su oferta y encuentre a su mujer, Stevens demuestra estar a la altura de las circunstancias, y ese mano a mano con Neeson es la perfecta puerta de ingreso a una historia tan impredecible como asfixiante.

*5. THE GUEST (2014)

El mismo año de Un paseo por las tumbas, Stevens filmó The Guest, indudablemente su mejor actuación hasta el momento en la segunda genialidad de Adam Wingard después de You're Next. El invitado de este film cuyos homenajes van desde John Carpenter hasta Nicolas Winding Refn es un símil Terminator que se hace pasar por amigo de un soldado caído en Afganistán para infiltrarse en la familia de ese joven. Durante la orquestación de su plan aparece Anna (Maika Monroe) y mientras el sonido de los sintetizadores acompañan el enamoramiento juvenil, The Guest muta en una historia de pérdida de la inocencia, una coming of age dentro de su contundente media hora de acción final.

Desde su ingreso al film con créditos que remiten a El exorcista, Stevens es una máquina de generar viñetas letales, con esa mirada cristalina que curiosamente va a contramano de los motivos ocultos de ese cruel superhéroe moderno.

*De yapa: Un mirada a la flamante serie Legion: