José Palazzo y la crisis del entretenimiento: "Sólo unos pocos van a llegar a julio del año que viene"

CORDOBA.- "El ocio nocturno clandestino demoniza nuestra actividad de espectáculos; la industria del espectáculo está en jaque. Los lugares de shows están al borde de cerrar. La situación está muy complicada", dice el productor José Palazzo en un video que se viralizó en las redes sociales.

El máximo responsable de Cosquín Rock advierte que hace tiempo desde el sector vienen planteando que, con la llegada de temperaturas más amables, el ocio "ilegal" se expande y hay quienes lo equiparan con los espectáculos. La propuesta es que gobiernos e industria trabajen de manera conjunta para que, autorizados, los empresarios actúen como "contención".

En diálogo con LA NACION, el productor insistió en que hace tiempo ven como se "demoniza" a los espectáculos, bares y restaurantes por las fiestas ilegales, clandestinas. "En el verano europeo se les fue de las manos, no pudieron controlarlo, en cambio en los shows organizados no hubo contagios, se respetaron las normas".

A su entender, todos los niveles del Gobierno "deberían usar los recursos de las empresas privadas profesionales en la organización de shows como una parte de la contención". Ratificó que es "inevitable" que después de siete meses de cuarentena y con la llegada del buen clima, la gente salga a reunirse, "y las cosas se pueden hacer bien, cumpliendo los protocolos, respetando las normas".

Asimismo, Palazzo describió que la industria está "en coma" y reiteró que hay espacios de espectáculos, teatros y salas de baile que "no se van a poder sostener; sólo unos pocos van a llegar a julio o agosto del año que viene cuando, tal vez, se pueda trabajar con normalidad".

"Salgo a hablar porque soy uno de los que voy a tratar de estar –siguió-, pero quizá otros también podrían sobrevivir y, además, ser una herramienta de contención. Hay vocación de colaborar y de trabajar a capacidad mínima, aun cuando no haya rentabilidad".

Palazzo enfatiza en que entiende el compromiso de las autoridades, "ocupadas y preocupadas" por muchos temas vinculados a la pandemia, pero sostiene que a este ritmo se llegará a mediados de enero sin un protocolo para los espectáculos. "En todo el país hay empresarios muy serios que cumplen con los estándares y la gente también se acostumbra a asumir conductas y disposiciones nuevas", apunta.

"De a poquito, entre todos, hay que volver porque es una forma de colaborar, de reducir las reuniones nocturnas clandestinas", plantea y agrega que se pueden hacer bailes, shows, obras de teatro con formaciones especiales, uso limitado de la capacidad de las salas, barbijo, distancia social y guardias que controlen. "La cultura responsable es segura", concluye.