Rating de TV: Sandro de América, lo más visto de la semana
Desde su debut, el lunes último, el interés de los televidentes por Sandro de América , la nueva ficción de Telefe, no deja de crecer. En la noche de su estreno logró promediar 15,4 puntos de rating, convirtiéndose en ese momento en el programa más visto de lo que va del año, pero a medida que avanzó la historia los números siguieron acompañando a esta propuesta y así ayer logró otro hito y alcanzó los 16,4 puntos, una cifra más que interesante para los tiempos que corren en la pantalla chica.
En el primer capítulo, bien introductorio de la historia que se iba a contar, vimos los inicios del cantante y cuáles fueron los primeros obstáculos que tuvo que atravesar para poder cumplir con su sueño de cantar. Allí apareció su primera novia, Silvina, interpretada por Calu Rivero. Luego, entró en escena Isabel Macedo, quien se puso en la piel de Daniela, un personaje inspirado en Julia Adela Visciani, una de las novias del Gitano. La relación entre ella y Sandro no estaba bien vista por la madre del cantante, ya que la joven estaba divorciada. "No creo que seas la mujer indicada para mi hijo", le señala en la ficción Nina (Paula Ransenberg), la madre de Sandro.
Si bien el martes bajó un poco el interés respecto de su debut (logró 14,2 puntos), con este ida y vuelta entre la madre y la novia de Sandro los números volvieron a estar del lado de Telefe y el capítulo del miércoles promedió 15,8 puntos de rating. Y así llegamos a lo ocurrido en el capítulo de anoche, en el cual el cantante atraviesa la dolorosa experiencia de perder a su padre, Vicente (Jorge Suárez).
En la ficción se puede escuchar a Antonio Grimau , quien interpreta a Sandro en la última etapa de su vida, recordando el doloroso momento: "Mi padre era poco amigo de dar explicaciones, pienso que tal vez prefirió enfrentarme al paisaje, a los hombres, a los cosas que me podían ayudar a entender la vida para que poco a poco yo sacara mis propias conclusiones. Tuvo sí el tacto de no ofrecerme espectáculos vulgares". Tras estas palabras, se ve al joven cantante (Agustín Sullivan) yendo a buscar a su padre - que se había levantado de la mesa familiar donde estaban cenando para tomar una medicación- y dándose cuenta que éste ya había fallecido.
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