Jimena Barón, entre lágrimas dijo: "Quiero ganar 'Bailando' porque el sueño es hermoso"

Este jueves a la pista del " Bailando por un sueño " llegó la bachata, y los encargados de romper el hielo fueron, otra vez, Jimena Barón y su flamante novio Mauro Caiazza. Después de una previa intensa, donde la actriz y cantante tuvo un ida y vuelta con su pareja terminó llorando al escuchar el veredicto del jurado y asegurar que está sintiendo de la presión de ganar el certamen para que se haga realidad su sueño.

Las idas y vueltas con Caizza

Antes de bailar, la actriz y cantante le contó a Marcelo Tinelli que tiene "esperanza y fe" de poder ganar el concurso. "Nunca comprendí la alegría de otros compañeros al ver que otros ganan. Prefiero blanquearlo", bromeó. Después, el bailarín confesó que en algún momento sintió miedo de lo que podría pasar entre ellos una vez de que termine el programa. "Estamos bien, pero no es fácil estar con ella. Es muy intensa y además cuenta todo", se quejó.

"Cuando empezamos a ensayar conté que estaba soltero y a los dos días sentí que ella venía vestida de una manera más provocativa, con medias de red, sin corpiño. Yo la veía como a una compañera de trabajo...", reveló después el bailarín, pero Barón lo interrumpió: "No se banca la intensidad porque dice que está muy cansado por los ensayos".

"¿Sabés lo que es llegar cansado a tu casa y que te aparezca con el disfraz de la hermana de Christian Grey?", se quejó él de nuevo. "A veces me voy a bañar y cuando agarro la toalla tiene marcas de algún torneo", reveló después, dando a entender que pertenecía al exnovio de Barón, el tenista Juan Martín del Potro.

El veredicto del jurado

Después del divertido pase de facturas, la pareja bailó al ritmo de "Sobredosis", de Romeo Santos. El primero de los jurados en dar su devolución fue Ángel de Brito (4). "Me gustan como pareja de baile, pero hoy no fue la mejor noche. Es un ritmo muy difícil y la vi a Jimena aterrada en los giros. Se notó el intento de ser prolijos todo el tiempo", aseguró el chimentero.

Laurita Fernández , dueña del voto secreto, expresó: "Fue una coreo hermosa, anoté varias cosas que tienen que ver con la técnica, pero quisiera decir que el que se lució fue Mauro porque se dejó llevar. Creo que Jime se tiene que olvidar y dejarse llevar también".

Después, llegó el turno de Florencia Peña (6): "Tenés un control tan grande en todo que es hora de que lo pierdas, al menos en la pista. Soltate porque si querés ganar te tenés que soltar". Finalmente, Marcelo Polino (3) expresó que le gustó la coreografía, pero "le faltó calentura". Con 13 puntos, la pareja quedó en un una zona complicada de cara a la sentencia.

Barón, entre lágrimas

Tras las devoluciones del jurado, Barón no puedo evitar el llanto y remarcar que al principio del programa se lo tomaba todo más livianamente, pero con el paso de las galas y al ser cada vez menos los participantes se daba cuenta que todo se le estaba haciendo más difícil, ya que empezaba a sentir la presión de ganar para poder a ayudar a la institución que representa.

"Es verdad que me puse muy sensible con el programa, te juro que sí. La verdad es que estoy un poco asustada porque no soy bailarina. (...) Siento que soy muy conocida como actriz como cantante, como lo que sea, y este es un programa de mucha exposición y yo, a decir verdad, había rogado estar tres galas e irme a mi casa porque pensé que no lo iba a poder hacer... Y uno lo arranca con una energía y vas quedando y de repente toda esa soltura de 'vemos qué pasa' la perdés, ahora somos diez y yo, de verdad, quiero ganar. Por ahí ahora sí me agarra la inseguridad de que hay bailarines y gente que baila mucho mejor y se ponen los ritmos más rápidos... Y quiero ganar porque el sueño es hermoso".

Y agregó: "Yo también me sentí rara en esta gala, pero lo volveremos hacer con la mejor..."