Vacaciones perfectas. El avión que pone la seguridad y el bienestar de los pasajeros como prioridad número 1 por dentro

La nueva línea de Air Europa, Dreamliner, lleva adelante una serie de consideraciones que vuelven a estos aviones las mejores opciones para vuelos larga distancia.

A la hora de planificar las vacaciones en familia, el gran objetivo es disfrutar, descansar, recargar energía, y en definitiva, crear recuerdos, postales que no se olvidan. Para eso, elegir un destino perfecto para toda la familia es la clave.

Air Europa lleva a sus pasajeros a los mejores lugares: un total de 33 destinos europeos y españoles, y 23 en América. Además, sabe que la seguridad y el confort son una gran prioridad a la hora de definir un viaje.

Alineado con ese objetivo, presentó su línea Dreamliner, una flota de aviones que pone el bienestar de los pasajeros ante todo. ¿Cómo lo logra? Apoyado en varios pilares: el bienestar ligado a una mejor presurización de cabina, mayor silencio a bordo, ventanas más amplias que dejan entrar la luz natural, mayor sensación de descanso y menos jetlag, la posibilidad de arribar a destino más rápido, y una serie de medidas que protegen el medio ambiente.

La presurización: una clave del bienestar en un vuelo

El Boeing 787 Dreamliner, el avión más moderno y sustentable de Air Europa, tiene como prioridad número 1 la seguridad y el bienestar. Para lograr ese objetivo, la presurización de cabina es fundamental. ¿Por qué? Porque es el proceso que garantiza el confort y la seguridad de los pasajeros en un avión.

Cuando una aeronave alcanza gran altitud, la presión atmosférica es demasiado baja. Y la presurización es responsable de que el cuerpo absorba más oxígeno y, de esta manera, experimente menos fatiga o malestar.

La cabina del 787 está presurizada a un nivel de 1.828,8 metros (609.6 metros por debajo de la mayoría de los aviones). Las pruebas muestran que, debido a que el cuerpo absorbe un 8% más de oxígeno en la sangre a esta altitud, los pasajeros sufren menos dolores de cabeza, mareos y cansancio.

Por otra parte, el sistema de filtración de aire de la flota Dreamliner no sólo controla la presencia de bacterias, virus y hongos, sino también los olores y otros agentes contaminantes. Eso reduce la irritación de garganta, ojos y nariz.

Y los avances en el control climático permiten una mayor humedad en el aire de la cabina. Eso reduce los efectos de sequedad asociados a volar.

Para sumar comodidad, la flota Dreamliner tiene mayor espacio para el equipaje de mano. Los pasajeros cuentan con suficiente espacio de almacenaje para colocar su franquicia de equipaje permitida en los compartimientos superiores, cerca de sus asientos.

Más rápido y con menos turbulencias

No sólo se trata de bienestar, el confort en vuelo es el primer paso de unas vacaciones soñadas. Gracias a la ubicación de sensores especiales, el 787 Dreamliner fue diseñado para garantizar un vuelo más suave en caso de turbulencia moderada. Eso reduce por ocho los casos de pasajeros que experimentan cinetosis -mareo por movimiento-, ya que, al detectar la turbulencia, envía a la superficie de control del ala la orden de contrarrestarla, suavizando el viaje.

Y además, para quienes desean llegar cuanto antes a destino, el equipo de diseño de Air Europa optimizó el diseño y los procesos para optimizar el tiempo de vuelo. Gracias a sus nuevos motores de vanguardia -desarrollados especialmente por Rolls Royce para este avión-, Dreamliner llega antes a destino, ya que se trata de una aeronave más liviana que alcanza mayor altitud. Al alcanzar mayor altitud, logra ir a un promedio de más de 900 kilómetros por hora y por eso, puede llegar hasta 40 minutos antes a Europa.

Silencio y vistas insuperables

Volar en el Boeing 787 Dreamliner garantiza un buen descanso y permite dormir, leer o ver una película sin interrupciones. La flota Dreamliner genera un impacto sonoro hasta 60% veces más bajo gracias a su nuevo diseño y a los motores Rolls Royce. Además, los materiales interiores reducen la vibración del avión y el sistema de climatización es prácticamente imperceptible.

Para quienes adoran volar del lado de la ventana, la vista del Dreamliner es incomparable, ya que sus ventanas son un 30% más grandes, y dejan pasar hasta un 60% más de luz natural. Cuentan con un control para que el pasajero pueda manejar el nivel de luminosidad con sólo apretar un botón. Y se ajustan al reloj biológico para simular la luz del día en vuelos de larga distancia. Esto disminuye el jet lag.

El avión más sustentable

Air Europa entiende la sustentabilidad como el desarrollo que satisface las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones, garantizando el equilibrio entre el crecimiento económico, el cuidado del medioambiente y el bienestar social.

Con el compromiso de llegar a ser sustentable, el Boeing 787 de Air Europa consume un 20% menos de combustible, eso reduce ampliamente sus emisiones de carbono.

Además, Dreamliner es el primer avión comercial que se fabrica en un 50% con materiales compuestos (plásticos reforzados con fibra de carbono), más livianos y resistentes que el aluminio, un gran avance en la industria.

Su eficiencia en el consumo le permite mayor flexibilidad y autonomía. Eso facilita a la aerolínea abrir nuevas rutas y optimizar el rendimiento de la flota y la red.

Finalmente, un tema fundamental, el servicio de a bordo se desarrolla con materiales amigables con el medioambiente, como servilletas de papel reciclado, bandejas y platos de papel, cubiertos compostables o de madera y vasos de cartón. A gran escala, eso reduce ampliamente el consumo de descartables y plásticos de un solo uso.

Si elegir el destino es importante, elegir el medio de transporte también. Air Europa propone el mayor confort, bienestar y eficiencia. Para llegar antes, descansados y sin jet lag.

Conocé más sobre la nueva línea Dreamliner de Air Europa acá.

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