La causa podría tener un juicio con Lagomarsino como único acusado

El fiscal Eduardo Taiano sostiene que Alberto Nisman fue asesinado, pero no sabe quién lo hizo. Dos años y nueve meses después de su muerte, en Comodoro Py ya imaginan un desenlace "poco ortodoxo": un juicio oral con un único acusado de homicidio, Diego Lagomarsino .

Según Taiano, él fue "partícipe necesario" porque "en virtud de un plan previamente acordado" aportó el arma con la que iban a matar a Nisman y, gracias a esa arma "amiga", simular un suicidio. El dictamen del fiscal no dice quién lo mató ni por qué. Nada de eso se sabe. Por eso, la figura es la de "homicidio simple".

"No hay ningún impedimento jurídico", dijo a LA NACION un funcionario que trabaja en el caso sobre la posibilidad de que Lagomarsino fuera elevado a juicio solo. El martes declarará en indagatoria, acusado por primera vez de haber tenido responsabilidad en la muerte del fiscal que fue su jefe. Después, si el juez Julián Ercolini lo procesa y la Cámara Federal confirma el procesamiento, Taiano pedirá la elevación a juicio del caso. Fuentes de los tribunales descuentan que lo hará -si es que el juez y la Cámara adoptan su hipótesis- aunque para entonces no estén identificados los demás supuestos responsables de lo que él asegura que fue, sin ninguna duda, un homicidio.

Para dar con esos presuntos asesinos, la fiscalía espera ahora el resultado de dos nuevos peritajes: los que empezaron sobre las computadoras y teléfonos secuestrados esta semana a Lagomarsino y a los custodios de Nisman, y un gigantesco estudio que ampliará el realizado sobre las llamadas que cruzaron espías, ex espías y funcionarios cuando Nisman acababa de morir pero en teoría nadie lo sabía. "Se están peritando 4000 teléfonos", informó a LA NACION uno de los investigadores. Demorará no menos de dos meses.

Taiano afirma que a Nisman lo mataron y una prueba central es, para él, el resultado del peritaje de la junta interdisciplinaria de Gendarmería. Con la disidencia de los peritos de la defensa, esa junta concluyó que Nisman murió asesinado por dos personas. Este resultado se contradice con los de la junta médica a cargo del Cuerpo Médico Forense, que depende de la Corte Suprema, y los de la junta criminalística, integrada por cuatro expertos de la Policía Federal.

Ninguno de los 17 peritos oficiales que intervinieron en aquellos estudios ni los dos de la defensa dijeron haber encontrado pruebas de que Nisman hubiera sido asesinado por alguien presente aquel día en el baño. La querella, en cambio, sostuvo siempre lo contrario. Gendarmería ahora acompaña la hipótesis de los expertos de la familia de Nisman.

Los estudios tienen puntos donde afirman cosas opuestas, pero hoy se presentan como complementarios. Taiano destaca que los informes previos le fueron "de gran utilidad" pero que sólo el de Gendarmería pudo llegar a una "conclusión certera" porque fue "el único estudio interdisciplinario llevado a cabo".

Un hallazgo del nuevo peritaje fue la "ketamina" que Gendarmería encontró en el cuerpo de Nisman. Según la junta interdisciplinaria, fue usada por los asesinos para drogar a la víctima y después matarla. El dictamen de Taiano, de 1087 páginas, solo la nombra una vez. Hace mención de que apareció, sin más valoraciones. El fiscal no quiso abrir la puerta al debate de si, dos años después, es un hallazgo confiable o no.

Las llamadas entre los espías son hoy, para los investigadores, la gran pista a investigar. El fiscal enumeró distintos elementos, atravesados todos por la idea de que el espionaje estuvo detrás de la muerte. Sospecha incluso que la custodia tuvo vínculos con servicios de inteligencia. Junto con Lagomarsino serán indagados en esta etapa los cuatro custodios que debían cuidar de Nisman el fin de semana que murió. Taiano no habla de una "zona liberada", que los haría responsables del homicidio. A ellos solo les dio por probado que "incumplieron sus deberes" de protección.